Juan Eslava Galán: "El comunismo es una especie de religión fallida"
Entrevista al escritor e historiador que presenta su nuevo libro 'Enciclopedia nazi contada para escépticos'.
En pleno siglo XXI parece que poco o nada se puede decir ya de lo que fue la Alemania nazi. A la ingente cantidad de ensayos y de novelas se suman ahora centenares de documentales con títulos tan estrafalarios como Nazi megaestructuras, Hitler, el adicto o El supercañón de Hitler.
Entre toda esta amalgama de productos relacionados con los nazis destaca el último libro del escritor e historiador Juan Eslava Galán (1948) titulado Enciclopedia nazi contada para los escépticos (Ed. Planeta) que sigue la estela de otras obras de este estilo como La conquista de América contada para escépticos o, el último antes de este, La Biblia contada para escépticos.
En una fría tarde de otoño, de esas que congelan los huesos, Eslava Galán atiende a El HuffPost en el hall de un conocido hotel del centro de Madrid, justo detrás de un estadio Santiago Bernabéu en obras. De forma sosegada y con un vaso de agua con hielo al que de vez en cuando le da un sorbo, el escritor profundiza en algunos elementos de los que ha hablado en la más de 900 páginas que tiene su enciclopedia nazi.
- ¿Por qué despierta tanta fascinación el mundo nazi?
La parafernalia nazi, la gran ópera que forman donde todo el pueblo alemán entra como figurante. Los grandes escenarios, la grandiosidad, la música, los desfiles, los uniformes... todo eso resulta visualmente muy atractivo.
Hubiera sido mucho más ligero que en el año 43, cuando ya saben que están derrotados, se entregaran y llegaran a un acuerdo con los aliados, pero no. Ellos siguen empecinados en lo suyo y mueren matando. Hitler se suicida cuando los rusos están a 200 metros de la cancillería, eso también le da una grandiosidad trágica a todo ese movimiento.
- ¿Dónde está el limite entre la curiosidad histórica y la admiración?
No es un mundo que merezca admiración, todo lo contrario. Llegan a la abyección máxima que es, en nombre de teorías completamente falsas y racistas, sacrificar a seis millones de inocentes. La fascinación es la fascinación que puede tener el mal, pero no creo que haya una fascinación de tono positivo por los nazis, aparte de los cuatro piraos que se llaman neonazis.
- ¿Cómo pudo un pueblo como el alemán dejarse engañar por esta gente?
Tiene fácil explicación. Alemania se había sentido muy humillada y muy saqueada por los términos del Tratado de Versalles, cuando acaba la Primera Guerra Mundial, que fueron absolutamente abusivo para el pueblo alemán. El pueblo alemán estaba muy herido y era de una sola condición: esto que han hecho con nosotros ha sido una tremenda injusticia. Hitler le dijo a los alemanes lo que estaban deseando oír. Después los llevó a ese tremendo sacrificio que fue la Segunda Guerra Mundial pero, en un principio, hasta el año 38, es un gran estadista, que maneja muy bien los tiempos y que está consiguiendo arrebatarle a los aliados cosas que parecían imposibles de recuperar. Se aprovecha de que los otros tienen las manos atadas porque son democracias. Francia e Inglaterra son democracias y no se pueden rearmar sin alarmar al pueblo, que son los que los tienen que votar. Ese es el defecto de los demócratas, si tienes que ganar las elecciones dentro de cuatro años no puedes estar fabricando armas porque van a decir “¿Qué pasa, nos llevas a otra guerra?” y no te van a votar. Hitler, como era un dictador, la fabricación de armas para él es muy positiva porque encima da trabajo a los que estaban parados.
- ¿Qué repercusión puede tener este libro dentro de la extrema derecha, cree que puede servir para seguir alimentando mitos?
No creo que le guste a la extrema derecha porque no trato bien a los nazis.
- Sus libros siempre suelen tener un toque irónico, de humor, y este, a pesar de la temática, también lo tiene.
Los lectores me escriben diciendo que se carcajean casi en cada página. Es un libro serio pero, al mismo tiempo, el toque de humor que no lo pierda.
- ¿Qué opina sobre la influencia que está teniendo los nuevos movimientos pro fascistas en las nuevas generaciones de jóvenes?
Son veleidades juveniles. Cuando esas personas maduran se les pasa. No creo que el fascismo pueda arraigar en nadie. Hay que distinguir una cosa: hay partidos de derechas y de izquierdas. Ya sabemos que los fascismos no son democráticos y los comunismos tampoco pero la izquierda y la derecha sí, siempre que encajen democráticamente y respeten las reglas del juego. Estos jóvenes que son neonazis y tal eso se les pasa.
- ¿Cómo cree que las nuevas generaciones entienden el fenómeno nazi? ¿Como un hecho que es de un momento concreto del pasado o como algo que sigue vivo?
Las consecuencias de la historia reciente las estamos viviendo todavía. El mundo moderno, el mundo actual, no se puede entender sin la Segunda Guerra Mundial y el reajuste que hubo después. La Segunda Guerra Mundial no se puede entender sin los fascismos y el siglo XX no se puede entender sin el triunfo de la revolución comunista en Rusia.
- ¿Qué papel jugó el comunismo para derrotar al fascismo?
Muy importante. La potencia que verdaderamente derrota a Hitler es la URSS. Tienen mucho que ver los americanos y los ingleses pero realmente los que llevan el peso, los que ponen la sangre, es la URSS. Eso hay que reconocerlo a pesar de que la historiografía occidental no siempre lo ha reconocido. Dicho eso, en el ascenso del nazismo y del fascismo en Italia tiene también mucho que ver el hecho de que hubiera triunfado una revolución comunista en Rusia. Ahora ya sabemos que el comunismo es una especie de religión fallida pero entonces no, parecía que era la esperanza de la humanidad y había muchos comunistas en toda Europa, en Alemania más que en ninguna parte. Los conservadores alemanes fían mucho de Hitler, de los nazis, que son los únicos que se están enfrentando con los comunistas en la calle.
- ¿Cuál es la acepción que más se le ha quedado de las que expone en el libro?
Hay una interesante que es cómo se pasa en tres meses de democracia a dictadura.
- ¿Cree que puede ocurrir algo así ahora?
La democracia no es un estado unívoco, admite marcha atrás. En la Historia se dan pasos hacia delante, también pasos hacia atrás. Alemania era una democracia en la República de Weimar y además una democracia con grandes derechos sociales, con gran atención a la mujer. Todo esto lo tenía, era una democracia avanzada en unas circunstancias especiales porque estaban machacados por la guerra y por el Tratado de Versalles, pero una democracia avanzada y en tres meses se convirtió en una dictadura. ¿Eso puede ocurrir? Claro que puede ocurrir. Ha ocurrido ya en Sudamérica. En el país de Maduro ha ocurrido, era una democracia y mira lo que es ahora.
- No sé si ha podido ver el famoso documental alemán sobre Franco en Netflix, ¿Tienen que venir de fuera a explicarnos cómo fue la dictadura en nuestro propio país?
No creo que ellos nos lo hayan explicado más de lo que sabíamos. Aquí sabíamos bastante bien lo que fue la dictadura. Lo he visto y no me ha enseñado nada nuevo.
- Hay muchas curiosidades relacionadas con la vida privada del dictador, que si su hija no era suya...
Los dictadores llevan consigo siempre este tipo de fake news. Se entiende fácilmente: estaba casado con doña Carmen y tuvo un hija, no hay más misterio, la hija era suya. Es un militar, con la conciencia y la mentalidad típicamente militar de ordeno y mando y se hace lo que yo mande.
- Dice el documental que Franco y Hitler no se soportaban y que el dictador nazi llegó a decir que “preferiría que me quitaran tres dientes sin anestesia a hablar una hora más con Franco”.
Cuando Franco llega a Hendaya sabe que no le conviene entrar en la Segunda Guerra Mundial pero sabe que Hitler lo va a presionar porque le ha fallado la Luftwaffe en la batalla de Inglaterra y necesita un Plan B, que es tomar Gibraltar para que no puedan pasar barcos del imperio británico por el estrecho, tengan que dar la vuelta por el Atlántico y allí están esperando los submarinos alemanes.
Ese es el plan de Hitler, que era un plan muy bueno. A Franco no le interesa porque está dependiendo del permiso que le dan los ingleses a barcos de trigo y de petróleo que cruzan en Atlántico con un documento que se llaman los Navy Certs. Si los ingleses le cierran el grifo, España capota en menos de un mes.
- Como mantiene el documental, ¿Cree que Franco gana la Guerra Civil gracias a los nazis y al fascismo italiano?
Eso es un error muy común. Franco gana la guerra gracias a la Alemania nazi, a la Italia fascista de Mussolini, a los americanos demócratas y a los ingleses demócratas. Esas son las cuatro grandes potencias que hacen que gane la guerra.
- En La conquista de América contada a los escépticos ya hablaba usted de un tema que está ahora de actualidad. Como historiador, ¿Qué le parece revisar con ojos del presente acontecimientos del pasado?
Un tremendo error. No podemos ahora ser buenistas en el pasado. Hay que verlo en el contexto en el que ocurren los hechos y no en un contexto actual. Ahora hemos evolucionado mucho en cuestión de Derechos Humanos y todo eso y entonces, obviamente, no lo había.
Isabel la Católica tiene claro dos cosas: no se puede esclavizar a los indios porque son súbditos de la corona de Castilla, súbdito igual que lo era un campesino de Cuenca. En segundo lugar, ella favorece los matrimonios mixtos, no son una raza inferior, son como nosotros. Eso sí, hay que bautizarlos y hay que hacerlos cristianos, solamente eso, después son como nosotros. Nosotros llevamos allí universidades, imprentas, carreteras, todo lo mismo que en España, con los mismos defectos que en España. ¿Había abusos? Claro, muchas veces las leyes, con un océano de por medio y sin comunicaciones como ahora las tenemos pues obviamente, claro, los encomenderos abusaban de los indios no desde luego por culpa de la corona española. La corona española hacía lo posible por protegerlos, cosas que los demás países que han tenido colonias, incluido Portugal, nunca han hecho.
- ¿Cree usted que, como pide el presidente de México, los españoles deberíamos pedir perdón?
Es una gilipollez propia de un tipo inculto o malintencionado, posiblemente malintencionado porque está casado con una historiadora la cual debe saber la verdad.
- El gobierno pretende sacar adelante una nueva Ley de Memoria democrática y parece que se abre un resquicio para juzgar los crímenes de la dictadura, algo que podría acabar con la Ley de Amnistía, ¿Qué opinión le merece esto?
Se está excediendo un poco. ¿Quedará algún responsable de algún crimen que se cometiera en la Guerra o en la dictadura? Han pasado 40 años, está todo el mundo muerto o los crímenes han prescrito. Un asesinato prescribe a los 20 años, ¿a quién vas a juzgar? Además, si no estás juzgando a ETA, si estás dejando que se escapen, gente que te ha pegado tiros en la nuca, de qué estamos hablando.