Juan Betancourt: “Quiero una Cuba libre, con derechos, que es lo mínimo que un país debe tener"

Filas para conseguir alimentos de primera necesidad, tiendas vacías, apagones frecuentes, farmacias desabastecidas y los casos de covid en ascenso. Todo ello ha hecho que Cuba haya vuelto a dinamitar 27 años después del Maleconazo, el primer levantamiento tras la Revolución de 1959. Los ciudadanos están protagonizando protestas históricas desde el 11 de julio al grito de ‘libertad’.

Los cubanos, a los que se les está restringiendo el acceso a Internet, siguen saliendo a la calle al tiempo que denuncian arrestos injustificados o secuestros y desapariciones. Mientras la preocupación se extiende por toda la comunidad internacional, los famosos cubanos que ven desde fuera cómo su país atraviesa esta gran crisis también piden auxilio.

Al grupo de músicos instalados en Miami que lanzaron el tema Patria y vida —Yotuel, Gente de Zona, Descemer Bueno, Maykel Osorbo y El Funky—, en el que cantan “no más mentiras, mi pueblo pide libertad, no más doctrinas”, se han unido otros como Emilio y Gloria Estefan, Olga Tañón, Romeo Santos, J Balvin o Daddy Yankee, que han solicitado ayuda humanitaria.

Precisamente Yotuel Romero se pronunció de nuevo hace unos días en el programa Este es el mood: “Allí pensar diferente es un delito. Me acusan de terrorista, no puedo volver, me detendrían”.

A su denuncia se suma el modelo y actor cubano Juan Betancourt, asentado en España, que espera que al menos esto sirva para que “el futuro de Cuba cambie, para que la gente joven y las nuevas generaciones puedan tener la libertad de elegir, de decidir qué quieren hacer con su futuro”, explica a El HuffPost.

Con ello se refiere a cosas tan básicas como ser dueños de sus propias decisiones, “si quieren vivir en Cuba o no, viajar, o simplemente tener derecho a votar y elegir quién quiere que les gobierne”, añade: “Quiero una Cuba libre, con derechos, que es lo mínimo que debe tener un país”.

Betancourt, de 30 años, abandonó Cuba “por suerte” antes de cumplir los 18, y “afortunadamente” la mayoría de sus amigos de toda la vida y su familia están en Miami. “España me ha acogido y es mi segunda casa con diferencia, gran parte de lo que tengo me lo ha dado España”, reconoce ante la pregunta de si se ve volviendo a Cuba en un futuro.

Aunque tampoco cierra la puerta. “La vida da muchas vueltas, tampoco digo que no volvería a mi tierra en un futuro si todo cambia y puede ser un país normal”, explica.

Ni se podía imaginar lo que su país está viviendo. El modelo siente que “ha pasado todo muy rápido”, no se lo esperaba, pero cuando empezó a ver ese movimiento de celebridades en Estados Unidos y en España quiso “participar en la difusión de esta pelea”.

Precisamente eso es lo que espera de España y de la comunidad internacional. “Lo que puede aportar todo el mundo es difusión. Cuanta más gente sepa qué está pasando y porqué, cuanta más presión haya... siempre va a ayudar. No creo que sea el detonante definitivo, pero puede ser una gran ayuda para que la dictadura vea que ya no puede aguantar más con la gente apoyando esta causa, más el pueblo, que es la principal arma para ganar esta batalla”, reflexiona.

Durante mucho tiempo en Cuba, relata, ha dado igual lo que se haya estudiado o lo que se haya sacrificado en formarse. “Al final tenías que trabajar en lo que te permitiera sobrevivir, tus objetivos en la vida se ven frustrados y espero que la gente pueda tener un futuro”, desea el actor.

Porque aunque estas protestas históricas le hayan pillado por sorpresa, entiende que es algo que “tarde o temprano iba a llegar, que pasaría en algún momento. Ya son muchos años bajo esta dictadura y bajo este régimen que ningún país del mundo podría sostener a la larga”, sentencia. Y en ese sentido, no puede evitar estar ‘contento’, en cierto modo, porque “el pueblo por fin haya decidido dar este paso por el bien de Cuba”.