Jorge Sanz se moja sobre si le gusta pagar impuestos y recuerda lo que le dijo Fernando Trueba
"Es tal la bendición que tenemos...".
El actor Jorge Sanz ha reivindicado en La Sexta noche la importancia de pagar impuestos y se ha mostrado indignado con los comisionistas de las mascarillas de Madrid.
“Hay que ver cuántas banderitas de España llevan, que a mí me hace mucha gracia esta gente”, ha asegurado el actor, que ha recordado la enseñanza que le dio el director Fernando Trueba cuando tenía 14 años.
“Me dijo: ‘Los impuestos son sagrados. Es el mejor invento de la historia de la humanidad’. Me lo dijo Fernando Trueba con 14 años”, ha remarcado antes de subrayar que, para él, “los servicios públicos que tenemos en España son impagables”.
“La seguridad social, la educación, los servicios públicos en general. A mí me gusta mucho viajar. Es tal la bendición que tenemos...”, ha insistido.
“No teníamos ni trajes EPI antes de la pandemia con los recortes famosos, me parece tal vergüenza y, desde luego, engañar así a tu país me parece... que le den cuatro pulseritas más de la bandera de España”, se ha quejado antes de pedir que no le tirasen más de la lengua con esos asuntos.
“Los actores no podemos hablar de política en público, ya no nos dejan. Yo quiero seguir trabajando, qué quieres que te diga”, ha dejado caer.
Mientras, Luis Medina y Alberto Luceño declararán este lunes ante el juez Adolfo Carretero por el cobro de comisiones por valor de 6 millones de euros gracias a la presunta venta irregular de mascarillas, guantes y test Covid al Ayuntamiento de Madrid cuando irrumpió la pandemia, momento en el que la especulación en el mercado bloqueaba la llegada de material sanitario.
El instructor investiga una querella de la Fiscalía Anticorrupción por la presunta comisión de delitos de estafa agravada, falsedad documental y blanqueo de capitales, hechos que el magistrado ve “graves” al tener lugar “en el momento más álgido de la pandemia” cuando había “miles de fallecimientos diarios.
El fiscal Luis Rodríguez Sol, que firma la querella, sostiene que los comisionistas, con ánimo de obtener “un exagerado e injustificado beneficio económico”, ofrecieron al Ayuntamiento de Madrid la posibilidad de adquirir “grandes remesas de material sanitario fabricado en China”.
El hijo de Naty Abascal como intermediario obtuvo una comisión de un millón de euros, que destinó a la compra de un velero por 325.515 euros y a dos bonos de inversión por valor cada uno de 200.000 euros.