J.K Rowling, acusada de nuevo de transfobia por su último libro
La escritora británica publicará próximamente 'Troubled Blood', una novela en la que el asesino se viste de mujer.
J.K Rowling vuelve al centro de la polémica con el colectivo trans. Después de sus duras declaraciones en contra de este colectivo en las que, por ejemplo, diferenciaba a las mujeres que habían nacido con genitales femeninos de las que no, la escritora ha vuelto a ser criticada por su último libro.
En su obra titulada Troubeled Blood (Sangre perturbada), según ha adelantado una reseña publicada en The Telegraph, el protagonista será tratará un asesino en serie cisgénero que se viste de mujer para matar.
La novela se publica este martes en Reino Unido y es la quinta parte de la saga sobre el investigador Cormoran Strike, toda ella publicada bajo el pseudónimo de Robert Galbraith.
Tal y como se recoge en el medio británico, el villano de la nueva ficción de la creadora de Harry Potter es descrito como “un asesino en serie que se viste de mujer para aprovecharse de sus víctimas” y la enseñanza que deja la obra es que “jamás hay que fiarse de un hombre vestido de mujer”.
El argumento del libro publicado en la reseña ha desenterrado el hacha de guerra de los defensores del colectivo —si es que se enterró en algún momento— y han pedido la “cancelación” de Rowling en redes sociales.
La oleada de comentarios en contra de la autora, que convirtieron el hashtag #RIPJKRowling en tendencia la madrugada de este martes, ha hecho que el actor Robbie Coltrane, quien dio vida a Hagrid en la saga del joven mago, salga en su defensa criticando a los que dice que se “ofenden demasiado pronto”.
“No creo que lo que dijo sea realmente ofensivo. No sé por qué, pero hay toda una generación de personas en Twitter que se quedan esperando a ser ofendidas”, ha dicho el intérprete en una entrevista a Radio Times.
“No habrían ganado la guerra, ¿verdad? Ese soy yo hablando como un viejo gruñón, pero tú solo piensas: ‘Oh, supérate’. Sea prudente, levántese y continúe”, ha señalado.
El intérprete, de 70 años, ha añadido que no quería entrar más allá en la polémica de la escritora. “No quiero involucrarme en todo eso por todo el correo de odio y toda esa mierda, que no necesito en mi momento de vida”, ha sentenciado.
Las declaraciones del actor rompen con la serie de posicionamientos de intérpretes como Daniel Radcliffe (Harry Potter), Emma Watson (Hermione Granger) y Rupert Grint (Ron Weasley) quienes ya defendieron los derechos de las personas trans en la anterior polémica de la novelista y criticaron su posición.