Jane Fonda: "Hay una historia que nos da miedo escuchar en esta industria"

La aparición de Jane Fonda en la noche de los Globos de Oro se ha convertido en la más esperada de la gala. La actriz sí que ha acudido de manera presencial para recoger a sus 83 años el Premio Cecil B. DeMille, un galardón en honor a su trayectoria cinematográfica. Lo ha recibido tres décadas después de que lo hiciera su padre, el también actor Henry Fonda.

“Gracias a todos. Estoy emocionadísima. Somos una comunidad de artistas y en momentos turbulentos como estos es esencial [que existamos] porque contamos historias que cambian el corazón y la mente”, ha comenzado relatando la intérprete, para después hacer un llamamiento a la convivencia: “Aunque seamos muy diferentes, todos somos seres humanos. He visto mucha diversidad en mi vida y me ha costado entenderla, pero todos los grandes canales de unión, Buda, Mahoma, Jesús... son una nueva energía para entender lo que quizás nos diese miedo”.

Jane Fonda ha dejado claro que cada película o serie aporta algo diferente al espectador, y ahí está su valía. “He abierto mis ojos a los emigrantes que se enfrentan a una nueva vida en otro país. Todas las series me han hecho sentir más empatía con lo que es ser negro”, ha subrayado en una gala en la que las críticas a la falta de afroamericanos en la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood ha cobrado mucho peso.

“Las películas pueden cambiar a la gente, pero hay una historia que nos da miedo escuchar en esta industria, qué voces respetamos y cuáles ignoramos. A quién ofrecemos sitio a la mesa y a quiénes no. Es culpa de todos nosotros, de quién selecciona... hagamos un esfuerzo para ampliar esas puertas y que todos puedan ser escuchados para estar en línea con la diversidad emergente”, ha añadido.

Y finalmente, ha cerrado su discurso como sólo Jane Fonda sabe hacerlo. “La cultura del arte no es sólo seguir la historia, sino a veces adelantarse a la historia. Y feliz cumpleaños al #MeToo”, ha sentenciado.