Itziar Castro: "Es la primera vez en mi carrera que me envían un guión que no especifica 'gorda"
La actriz se estrena como profesora de interpretación en 'OT' sustituyendo a Los Javis, y vuelve al cine con 'Matar a Dios'.
Itziar Castro no es "la gorda del cine español sino que también es una actriz". Lo dice la intérprete, que a partir de este miércoles llegará periódicamente a nuestras casas como la profesora de interpretación de OT. Del formato de TVE cuenta a El HuffPost que lo vive "con mucha ilusión y ganas", aunque también "con mucha responsabilidad más que presión".
Muchos la descubrieron gracias a su papel principal en Pieles, por el que estuvo nominada al Goya a Mejor actriz revelación, a pesar de que ya llevaba muchos años trabajando. La catalana de 41 años caló hondo, y tras este llegaron otros proyectos como Operación Triunfo, Matar a Dios o Vis a Vis. Además, en la cuarta temporada de esta serie, Goya, su personaje, cobra mucho más peso.
Se ha ganado a su público con su trabajo, aunque también con sus reivindicaciones: quiere que se rompan moldes con las actrices XXL, pero que se haga de verdad, utiliza el humor (sobre todo negro) a diario y relaciona "feminismo y vida".
Mientras pide que la industria empiece a romper las reglas del juego —por ejemplo, dando un papel protagonista en una comedia romántica a una mujer de talla grande, obviando que sea gorda y sin traumas por ello—, ella ya ha dado ese paso. Lo ha hecho con la ayuda del equipo de Matar a Dios, que se estrena en cines el 21 de septiembre. Ha sido la primera vez que ha recibido un guión que no especificaba que su personaje era 'gorda'.
En los últimos tiempos has participado (y sigues haciéndolo) en trabajos con mucho éxito, como Vis a Vis o Pieles. ¿Qué idea tenías del triunfo cuando empezaste a trabajar?
Cuando eres una niña siempre sueñas con los Oscar y los Goya, pero cuando empiezas a trabajar y te das cuenta de cómo funciona esta profesión... Para mí el premio es trabajar, que pueda llegar a fin de mes. Este año fui a los Goya con los números rojos en el banco. A veces no tienes ingresos y pasa.
¿Qué piensas cuando hablan de ti como una actriz revelación a pesar de llevar tanto tiempo trabajando?
Siempre está bien que te pongan cara y que la industria y el público te conozca, pero que no lo hagan no significa que estés haciendo mal tu trabajo. Por ejemplo, trabajar en un parque temático es muy complicado y hay muchos actores que se ganan la vida así. A mí me da igual que me hayan descubierto ahora, me siento honrada igualmente. También influye mucho la suerte y los años de lucha, de trabajar, de no tirar la toalla, de me quiero morir, de no llego a final de mes... La perseverancia da sus frutos, pero hay actores buenísimos que llevan toda la vida trabajando y que no han logrado reconocimiento. María Galiana fue actriz revelación a los 60 años. Nunca es tarde si la dicha es buena.
Antes de ponerte ante las cámaras, trabajabas en el circo. ¿Qué hacías exactamente?
Hice circo contemporáneo hace unos años, sin animales, espectáculos en los que se mezclan las artes. Aprendes conceptos de equipo, de protección, de familia. Te enseña muchas cosas, también a ponerte límites físicos, a saber hasta dónde llegas. Yo aguantaba una estructura con mi cuerpo, con una cuerda, todo de palos, y al otro extremo había un funambulista, mientras yo cantaba. Es muy difícil.
Vemos mucho discurso feminista en el mundo del cine, pero sigue habiendo poca financiación para proyectos de mujeres. ¿Se hace sólo para quedar bien?
Yo soy de feminismo y vida. El feminismo debería ser una asignatura obligatoria en la escuela. Si alguien dice 'yo no soy un machista' entonces tiene que ser feminista, si no es que no sabes qué es ser feminista. Está mal entendido. Queremos la igualdad de oportunidades. Los hombres y las mujeres no somos iguales, pero tampoco lo queremos. Físicamente, y en energía... El cine siempre es un reflejo de la vida y el feminismo tiene que estar presente. Es cíclico y es tan importante su presencia como hacer películas sobre la Guerra Civil. Siempre se dice que se habla mucho de las mujeres y de la Guerra Civil, pero no es así, no se ha hablado lo suficiente porque no lo tenemos integrado. Venimos de una educación patriarcal y no existen las mismas oportunidades, no nos queda otra que luchar y eso no significa que haya que ser excluyentes. Los hombres tienen que ser feministas. Me encantó cuando Juan Diego recogió el premio de la Unión de Actores y dijo "yo soy machista". Nos cuesta más, pero tenemos que seguir llegando.
Pero si se está hablando tanto de ello y parece que los hombres de la industria apoyan la lucha de las mujeres, ¿por qué ellas aún no encuentran su espacio para dirigir?
Igual que no encuentran los huecos los directores noveles, como en Matar a Dios (Caye Casas y Albert Pintó, 2017), que no tiene una gran productora detrás ni financiación externa. De hecho, el año pasado grandes directores muy conocidos estaban nominados a los Goya por sus cortos porque no tenían financiación para las películas. Es muy complicado levantar un proyecto. Los altos cargos que mueven el cine tienen que renovarse y tienen que abrir las miras y buscar una nueva forma. La televisión ha pillado el camino con las plataformas. Los hombres también tienen cierto miedo a que las mujeres les quiten el puesto y hay que pensar que podemos convivir todos. Faltan mujeres en lugares de poder. En el ministerio de Cultura ha habido pocas mujeres. En Vis a Vis tenemos una directora maravillosa que ha hecho unas escenas de acción con las que alucinas y muchas veces se piensa que las mujeres no podemos hacer ese tipo de secuencias. ¿Por qué no?
Todos sabemos cómo afecta el sobrepeso a la salud. Dejando de lado eso, siempre se habla de (otros) inconvenientes de estar gordo. ¿Ha tenido en tu caso algún aspecto positivo?
Esto es un tema peliaguado. No quiero hacer apología de estar gorda, no creo que estar como yo sea sano. Me quiero mucho, me gusto como soy y sí es cierto que he tenido momentos de bajón de salud como cualquier persona, y también es cierto que mi físico me ha ayudado a tener ciertos papeles. Por mi físico no me han encasillado en un estilo cómico o dramático como le pasa por ejemplo a Silvia Abril, que siempre reivindica un papel dramático. En mi caso, como buscaban siempre el físico antes que el tipo de actriz que eres, me ha dado la oportunidad de interpretar un abanico de personajes amplio. Drama, comedia, terror, circo, cabaret, musicales... Esto ha cambiado con Matar a Dios. Es la primera vez en mi carrera que me envían un guión en el que no ponía 'gorda'. Lo primero que hice fue llamar a los directores para decirles que se habían equivocado porque no ponía 'gorda' en ningún lugar. Uno de los piropos más bonitos que me han dicho al ver la película es "Itziar no te he visto gorda". Con Matar a Dios pueden ver que Itziar Castro no es la gorda del cine español, sino que también es una actriz.
¿Qué papel haces en Matar a Dios?
Soy la única mujer de la peli. Ana es la mujer, la cuñada, la nuera, la amiga, la que sustenta a todos los hombres. Curiosamente la han tachado de machista, pero precisamente reivindica que podemos decir "qué machista es nuestra sociedad". Lo que están queriendo hacer los directores es decir que vivimos en una sociedad muy machista, que esto existe. Ana es un personaje que parece de una forma, pero evoluciona y acaba siendo de otra. La ves pequeñita y abnegada a un marido súpermachista, su primer hombre, su primer novio, pero sigue aguantando.
Dices que es el primer guión en el que no se especifica que el personaje es gordo. ¿Crees que hay gente que solo ve eso en ti?
Creo que ya no, porque tengo la suerte de hacer personajes como el de Vis a Vis, que ha ayudado a quitar tópicos. Ha hecho una labor brutal con eso. Todos los personajes son tópicos, pero ese no es su hándicap, es decir, hay una lesbiana, pero su hándicap es estar enamorada de alguien que quiere a otra... Goya (mi personaje) es súperpotente físicamente, pero tiene a todas sus caris alrededor y su problema es de convivencia, no tiene complejo. Todos estos papeles han hecho que la gente vea que soy una buena actriz que defiende desde la verdad y desde donde cree que hay que poner la carne en el asador. Y luego he tenido la suerte de que Harper's Bazaar cogiera aquel juego de Twitter. Me encanta que en los photocall me pregunten de quién voy vestida, porque hace unos años, antes de Pieles, no conseguía a nadie que me vistiera. Una amiga y yo tuvimos que hacer los trajes de Berlín y de la premier mano a mano. Salir en revistas de moda, como en Málaga, junto a Paz Vega o a Aura Garrido como una de las mejores vestidas, para mí es un triunfazo, porque es decir: "Hola, las diferentes también podemos estar guapas y lucir". Todo esto hace que la gente vea cada vez más a Itziar y menos su físico.
¿Alguna vez te han preguntado cuál es tu secreto de belleza (una pregunta muy recurrente para las actrices)? ¿Por qué parece que la gente con sobrepeso tiene menos derecho a estar guapa?
La frase hacia la gente gorda siempre es: "Qué pena, con lo mona que eres de cara". Pues a mí me desnudan todos. Es curioso, porque Najwa Nimri me dice: "Parece que estés vestida con tanta carne, es que estás súperguapa. Eso es bonito". No me preguntan mi secreto de belleza, sino qué hago para sentirme bien con mi físico. Cuando te sientes realizada con tu vida, la belleza sale por los poros, la felicidad. Tienes que quererte, si no te gustas lo cambias y si no puedes cambiarlo haces el trabajo de quererte. Mi madre me ha enseñado mucho. Nació con un problema en el labio y en la calle la llamaban monstruo y es la reina del cotarro. Nadie va a conseguir que yo deje de hacer lo que quiero hacer. En las redes, cuando eres gorda y lo llevas con humor parece que estás haciendo apología y que no puedes ser feliz. En cambio, a una persona delgada que fuma todo el día nadie le dice nada. Cuando en Twitter ven fotos de chicas súperdelgadas comiendo hamburguesas, les parece sexy. Si pones a una persona gorda comiendo una zanahoria, les parecerá mal. Nos tienen más en el punto de mira.
¿Es cierto que cobras el 20% más que otros actores por sobrepeso como se publicó?
Eso es una gran mentira. Si cobráramos más por ser gordas, estarían todas gordas. Si cobrara al peso sería rica. De hecho, las mujeres cobramos menos en general, si no eres protagonista también se cobra menos, y las gordas nunca lo somos. Lo que sí es cierto es que en temas de publicidad o figuración, cuando tienes un perfil diferente que cuesta más encontrar entras en un apartado especial, se paga un extra.
Nunca sois protagonistas y siempre con papeles dramáticos, ¿por qué? Tú has dicho que querías hacer una comedia romántica...
Quiero ser como Concha Velasco y Asunción Balaguer, estar trabajando para siempre. Soy actriz porque quería vivir muchas vidas y era la única opción de vivirlas todas. Dije que nunca he hecho una comedia romántica como protagonista, como Notting Hill oCuatro bodas y un funeral. De estas cosas pastelosas, lo más comercial. Si una actriz de talla grande hace un papel como el de Julia Roberts, sin trauma, obviando que es gorda, estaría rompiendo moldes. Hay que atreverse a cambiar las reglas del juego. Si hay un conflicto siempre es por su peso, por eso me gustaría hacer una comedia al uso. Somos las eternas secundarias, aunque siempre me ha encantado serlo, tienes menos presión. Ser la secundaria te da mucho juego. Luego hay grandes protagonistas como Kathy Bates. Me comparan mucho con Melissa McCarthy. Lo está haciendo muy bien, ya no tiene el hándicap por ser gorda. Me vuelve loca Precious, ¿pero por qué la gorda siempre tiene que ser la pobrecita? Yo soy más de American Horror Story, me vuelve loca. Mujeres de diferentes sexos, tendencias, etnias... hasta hay una con Síndrome de Down, ¿y es menos bruja? Al contrario, es la más cabrona. Ahí es donde quiero jugar, por eso Vis a Vis fue un regalo.
Parece que te encantaría hacer un papel en American Horror Story.
Daría la vida por estar ahí. Es lo más. Pero también en Glee.
El humor está en el punto de mira. ¿Cómo te tomas los chistes sobre el peso?
Me han tachado de que hago muchos chistes sobre gordas, es verdad. Intento no hacerlo, pero es que me hace gracia. No lo pienso, me sale. Me gusta reírme de la vida, de mí misma y de las situaciones. La creatividad no debe tener límites, pero si alguien se siente ofendido hay que pedir perdón si debe tenerlo. Me encanta el humor negro. Matar a Dios es humor negro, también Campeones.
Siempre hay etiquetas en los chistes. Es ficción, aunque siempre hay puntos de realidad. A un pintor no se le cuestiona si dibuja mujeres desnudas. Es pintura, es arte y eso no daña a nadie y se asume, como en una escena violenta en una película. Un monologuista expresa lo mismo. ¿Por qué no puede hacerlo? ¿Porque se supone que es más verdad?
¿Qué me puedes contar de la nueva temporada de Vis a Vis?
Los guionistas y creadores han hecho el más difícil todavía, a pesar de que parece que no se pueden superar. Va a ser más potente, con mucha más acción, se van a ver escenas de acción que no se han hecho nunca. Aún quedan cosas por hacer por primera vez en Vis a Vis. En el teaser se ve muchísima más acción, pero también hay mucho más sentimiento. Parece mucho más violenta y rápida, pero también más amorosa, se conoce más a los personajes. Se va a saber por qué Goya está en la cárcel y por qué es así. En esta cuarta temporada me han hecho muchos regalitos, porque Goya entró como alguien secundario y ahora se relaciona mucho más. Hay interacciones de presas que nunca han hecho una secuencia juntas. La marea amarilla va a tener muchas sorpresas.
No es el único de tus estrenos pendientes. ¿Cómo llevas la presión de sustituir a dos profesores de OT tan queridos como Los Javis?
Tengo toda la presión del mundo. Es un proyecto muy interesante y lo llevo con vértigo. Lo vivo con mucha ilusión y ganas y a la vez con mucha responsabilidad más que presión. Todos sabemos que es un programa de televisión, pero no hay que olvidar que nuestra función es ayudarlos, enseñarles y acompañarles para que cada día sean mejores. Van a salir de ahí para trabajar en este mundo y es una responsabilidad darles las máximas herramientas en el tiempo que tenemos para que se defiendan cuando salgan.
¿Tienes ya algo preparado para las clases?
Sí y no, porque tengo muchas ideas. He estado en otras ediciones como coro o dando una masterclass, y sé que OT está vivo, muy vivo, y cada semana cambia. Nunca sabemos quién se va a ir, se monta todo muy rápido y vas muy sobre la marcha. El trabajo va a salir de lo que me den ellos. No puedo prepararme ciertas cosas sin saber qué canción van a cantar, cómo la quieren cantar... Cada tema es una historia, como pequeños cortometrajes, vamos a enfocarlo así.
Por cierto, aclárame eso de que te han querido comprar en algunos países. ¿Cuál fue tu respuesta?
En Marruecos, en la boda de un amigo bereber, me ofrecieron que todo lo que tenía delante podía ser mío. Dije "¿Con lo que has viajado y me intentas conquistar de esa forma?" Aquí también pasa, la gente dice "este es mi coche, esta es mi casa". Hay gente que no tiene el don del ligue e intenta llegar por lo material. Se liga muy mal. Pero es cierto que en muchas culturas las mujeres como yo son sinónimo de fertilidad y puedo resultar más exótica porque soy pelirroja de ojos claros. Me han ofrecido muchas cosas en muchas culturas.
Y ahora que llega Matar a Dios, ¿qué tiene de especial esta película?
Emilio Gavira está muy potente, todos somos muy frikis físicamente, pero cualquiera de nuestros personajes lo podría haber hecho cualquier otro actor y, aún así, nos escogieron a nosotros. Me parece muy arriesgado. Lié a Macarena Gómez para hacer un cameo telefónico. La película tiene al enano del cine español, a la gorda del cine español, al friki... Se comenta (se hace referencia a ello) en la película, pero ya está, no es su hándicap. Les gustamos como actores y han apostado por nosotros. Con el humor se puede reflexionar sobre cosas fundamentales. Si mañana te dicen que se acaba la raza humana y que puedes salvar a dos personas, ¿a qué dos personas escogerías? Esto es Matar a Dios.