¿Quién manda en Madrid?

¿Quién manda en Madrid?

Una presidenta sin liderazgo, rencillas internas, presiones de Moncloa... y Miguel Ángel Rodríguez detrás de todo.

AyusoEFE

“No hay nadie al volante”. Esta confesión la hacía un dirigente de Génova 13 en privado durante los caóticos días de la semana pasada en los que Madrid retrasaba decisiones drásticas, crecían dramáticamente los contagios, se filtraban los desencuentros dentro del Gobierno regional y la imagen de Isabel Díaz Ayuso se hundía más y más.

El viernes llegaban las polémicas medidas de confinamientos en 37 áreas básicas de salud en una rueda de prensa que no dejó a nadie indiferente. Y a partir de ahí una frenética negociación con La Moncloa para el encuentro del lunes entre Ayuso y Pedro Sánchez, que al final se salvó con ese acuerdo de un grupo de trabajo (que a muchos les ha sabido a poco).

Otra vez todos pendientes de más medias. “Probablemente” se sabrán el viernes, según el viceconsejero de Sanidad, Antonio Zapatero. La sensación de desgobierno ha ido unida al Gobierno de coalición PP-Cs en Madrid desde el mismo momento en el que nació hace un año. Un universo interno con peleas entre los socios, dentro del propio sector del Partido Popular, rencillas también a nivel de partido en Madrid y hasta tentáculos preocupantes con la calle Génova. No falta de nada. Y ahora además con unidades en las que participa el Gobierno central.

Pero, ¿quién manda en Madrid realmente? ¿Cómo se toman las decisiones? Ayuso es la punta de lanza, pero desde que llegó se evidenció su falta de experiencia en la gestión, su carácter explosivo poco dado a consensos, su interés por lo mediático frente a la buena redacción del BOCAM y su ausencia de liderazgo más allá de incendiarios tuits. Ni consejeros ni técnicos ni compañeros de partido. El “único” al que hace caso, según fuentes del Gobierno regional, es a Miguel Ángel Rodríguez.

Miguel Ángel Rodríguez es el "único" al que escucha ayuso. MAR y punto

Es su gurú, el hombre que marca la política de la presidenta, el que toma las decisiones junto a ella. Génova 13 lo puso junto a Ayuso en la campaña y desde que llegó a la Puerta del Sol ejerce como jefe de gabinete. El hombre que más influyó en la política comunicativa de José María Aznar y al que le gusta más una polémica que la gestión. ¿Pero no le hace caso al resto de consejeros en estos días? “MAR. Y punto”, repite esta fuente del Ejecutivo autonómico.

Es tal su poder que ha sido el encargado de negociar durante estos días el acuerdo con el jefe de gabinete de Pedro Sánchez, Iván Redondo. Los dos fueron los protagonistas secretos del pacto a través de discretas conversaciones para salir las dos administraciones indemnes y que no hubiera un claro ganador. Los dos estuvieron al lado de sus jefes el pasado lunes y se les vio juntos siguiendo la comparecencia conjunta adornada con 24 banderas de España y la Comunidad.

  Félix Bolaños, Miguel Ángel Rodríguez e Iván RedondoEFE

Cuando llegó a la Puerta del Sol, Pablo Casado también envió junto a ella a su jefe de gabinete en el PP, Javier Fernández Lasquetty, otro del sector duro y anti Rajoy. Pero el hoy consejero de Hacienda no ha conseguido hacerse con los favores de Ayuso y ser el favorito de la corte de los consejos. 

Uno de los pilares clave estos días en Enrique Ruiz Escudero, el titular de Sanidad. Guardan las formas, pero tampoco, según fuentes ‘populares’, tiene una conexión muy buena con la presidenta. Han tenido sus más y sus menos y los rumores sobre su marcha son constantes en los círculos madrileños. En ese mar de fondo se entendió el nombramiento de Antonio Zapatero, que pasó de Ifema a ser viceconsejero. Un sustituto perfecto para Ruiz Escudero a ojos de Ayuso, pero cuya luz ya no brilla tan fuerte y ha sido otra bomba de relojería. Muy significativo es el momento en el que habló de confinamientos selectivos y dijo que se lo había comunicado por whatsapp a la presidenta. “Está noche podré dormir tranquilo”, comentó a los suyos.

Ayuso ignora a Aguado, apenas le cuenta nada

Dentro del Gobierno regional sí tiene peso Enrique López, el titular de Justicia. Un hombre que sigue trabajando también mucho en la calle Génova 13 e incluso Pablo Casado le encomendó la misión primero de pactar (y luego torpedear) un nuevo Poder Judicial con el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo. La arquitectura jurídica de las medidas lleva su firma.

¿Y su socio de Cs? ¿Pinta algo? ¿Qué pasa con Ignacio Aguado? Las relaciones han sido malísimas desde el principio. No se entienden y, sobre todo, ella no le da cuenta de nada. En Cs vivieron muy sobresaltados los días pasados, enterándose de todo por la prensa. Al final hicieron un gesto de intento de unidad saliendo juntos en la comparecencia. Pero para nada ejerce con plenas funciones ese papel de portavoz que tiene. Y el ‘número dos’ del Gobierno regional ha logrado meterse, tras presionar, en el grupo de trabajo creado con Moncloa.

Precisamente ese nuevo órgano está llamado a jugar un papel esencial a partir de las próximas semanas y el Gobierno central lo va a utilizar para presionar a Madrid a tomar medidas más contundentes. Por parte de Moncloa estarán los ministros de Sanidad (Salvador Illa) y de Política Territorial (Carolina Darias), mientras que por la CAM tienen asiento Aguado y Ruiz Escudero. Ese escenario de contrapesos será vital a partir de ahora en la gestión de la pandemia.

  Enrique Ruiz EscuderoEFE

Todos los caminos llevan también a Génova 13. Pablo Casado ha unido su destino al de Ayuso. Saben que se necesitan y son buenos amigos. Más tensiones internas ha habido entre Sol y el PP por la posibilidad de adelantar las elecciones, un escenario que se ha barajado en entorno de Ayuso coincidiendo con las futuras catalanas. Pero en el equipo de Casado no quieren ni oír hablar de eso y siempre lo desaconsejan.

Moncloa presionará a través de Illa y Darias para que Madrid tome más medidas

Poder institucional y… orgánico. El PP regional vive todavía bajo el paraguas de una gestora dirigida por Pío García-Escudero, tras la marcha de Cristina Cifuentes. Otro melón que todavía no se ha abierto y, por tanto, no hay un contrapeso del partido en la autonomía. La sucesora natural debería ser Ayuso, pero para muchos sería una acumulación de poder. Otra opción sería José Luis Martínez-Almeida, pero los “ayusistas” creen que ya se ha premiado demasiado al alcalde, que ahora también es portavoz nacional. Un sector reclama que haya una tercera vía, que podría estar encarnada por Ana Camíns.

Pongamos que hablamos de Madrid.