Los incendios en la Comunidad Valenciana ya arrasan más de 21.000 hectáreas
En Bejís (Castellón), las llamas ya han calcinado 9.900 hectáreas y han obligado a la evacuación de cerca de 1.500 personas de cuatro municipios y al confinamiento de un quinto.
Un total de 30 medios aéreos y 400 efectivos combaten el fuego con “enormes dificultades” en el incendio iniciado en Bejís (Castellón) que ha provocado el desalojo de este pueblo y de dos más, Torás y Teresa, además de algunas pedanías, y que ha desatado momentos de “miedo e incertidumbre”. A estos se ha sumado la evacuación preventiva del municipio de Sacañet durante la madrugada, debido a un cambio en la dirección del viento y el confinamiento de los vecinos de Víver.
Las llamas, que ya han arrasado cerca de 10.000 hectáreas han llegado este miércoles hasta la provincia de Valencia, donde afecta a la localidad de Alcublas. El control del fuego se dificulta debido a la orografía del terreno, que es “tremendamente dura”, con profundos barrancos, una tupida masa forestal, y la presencia de aldeas y urbanizaciones diseminadas a lo largo del territorio, que también se han visto amenazadas.
Desde el departamento de bomberos de la Diputación de Castellón se dirige un dispositivo de más de 400 efectivos, incluidos bomberos de Diputación, bomberos forestales de GVA-Sgise, Unidad Militar de Emergencias, Consorcio de Bomberos de Valencia, bomberos del Ayuntamiento de València y de Castelló y medios de las comunidades autónomas de Aragón, Castilla la Mancha, Cataluña y Murcia. Además, treinta medios aéreos combaten las llamas desde el aire.
En horas de la tarde, las condiciones meteorológicas han cambiado y ha empezado a llover en ambos focos activos.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha indicado que junto a la lluvia débil también se han registrado algunos rayos en la zona de Bejís. Por otro lado, en la zona de Vall d’Ebo sí se han dado precipitaciones más importantes incluso con granizo.
Tres bomberos heridos
Tres bomberos han resultado heridos con carácter leve esta madrugada durante las labores de extinción en Castellón. Debido al “comportamiento extremo” del fuego, las llamas llegaron a calcinar camión de bomberos, hiriendo a dos bomberos del departamento de Diputación de Castellón, ya dados de alta, y a uno de los medios de Aragón que evoluciona favorablemente.
Los efectivos tratan de contener ahora con “redoblados esfuerzos” el “avance imparable” de las últimas horas, aunque en estos momentos el fuego “sigue sin estar estabilizado”, según la información del cuerpo provincial.
De esta forma, 80 personas se han desplazado a la localidad de Alcublas, donde Cruz Roja ha instalado un albergue provisional en el polideportivo, si bien la mayoría son personas que estaban en sus segundas residencias y han regresado a sus casas, por lo que pocas necesitan albergue. Por lo que respecta al bombero herido, se trata de un agente de protección de la naturaleza del equipo de bomberos de Aragón desplazado al lugar del incendio, quien ha sido trasladado a un centro hospitalario.
El incendio de Vall d’Ebo (Alicante) ha quemado ya 11.500 hectáreas, según la estimación de superficie afectada llevada a cabo a las dos de esta madrugada, mientras que durante la noche no ha habido nuevos desalojos ni afecciones a viviendas. Según informa el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat, el incendio, que comenzó el sábado, continúa activo en todos los frentes, aunque debido al aumento de la humedad avanza de forma mas lenta y se espera una evolución más favorable a lo largo de la mañana de este miércoles.
En las labores de extinción de este incendio trabajan actualmente 30 dotaciones de los bomberos de la Diputación de Alicante, 13 unidades de los bomberos forestales y 4 Brigadas de Refuerzo de los Bomberos de Valencia, y al amanecer se han incorporado los medios aéreos (10 de la Generalitat, 5 del Ministerio de Transición Ecológica y otros de Murcia, Castilla La Mancha y la UME).
A las 9:30 horas está prevista una reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI), presidida por el president de la Generalitat, Ximo Puig, para analizar los incendios forestales que afectan a la Comunitat Valenciana: el Vall d’Ebo y el de Bejís (Castellón).
Los desalojos de Torás y Teresa
No solo los desalojos de Bejís primero y después de Torás y Teresa han generado preocupación e incertidumbre, sino que el miedo se ha apoderado de muchos vecinos, especialmente de los pasajeros de un tren que cuando el convoy en el que viajaban, a la altura de Torás, se ha parado para emprender la vuelta ante la cercanía del fuego han salido al exterior y diez de ellos han resultado heridos, cuatro de ellos por quemaduras y de los cuales tres están graves.
La comarca interior del Alto Palancia se ha visto sacudida por unas llamas y una gran columna de humo -visible hasta municipios más al norte de Castelló- que hacían abandonar a muchas personas sus domicilios, anticipándose al desalojo. Muchos vecinos de Teresa, atónitos ante el espectáculo que se veía desde sus terrazas, decidían emprender el camino hacia primeras residencias o casas de familiares. Algunos relataban: “El aire quemaba, y por encima de la montaña se veía un resplandor de fuego terrorífico”.
El fuego se desplazaba después hacia Viver, donde no ha sido necesario el desalojo pero sí se ha ordenado el confinamiento de la población, pese a lo cual muchas personas que estaban pasando allí sus vacaciones de verano han decidido regresar a sus lugares de origen. El Ayuntamiento de Viver ha recordado que el confinamiento sigue activo y los vecinos deben permanecer en casa con las ventanas y las puertas cerradas. La pedanía de Ragudo, perteneciente a este municipio, sí que ha sido desalojada por su cercanía con las llamas.
Los diez heridos que han sido atendidos por lesiones, entre ellos cuatro por quemaduras, en un incidente ocurrido este martes en el tren que circulaba a la altura de Torás habían abandonado el vagón y se vieron sorprendidos por las llamas del incendio originado en Bejís, en la provincia de Castellón.
Según ha explicado la delegada del Gobierno en declaraciones a À Punt, Pilar Bernabé, el accidente se ha producido cuando la maquinista ha visto que caía ceniza y ha decidido volver con el tren en la dirección de origen.
En la maniobra de vuelta ha habido un grupo de viajeros que ha abierto las puertas y han salido del tren; en ese momento, han sido alcanzado por las llamas en algún punto a la altura de Torás. Algunos de los viajeros que han salido del tren han regresado al mismo y otros se han desplazado a pie hasta Caudiel, donde han sido recogidos. En total, según fuentes de la Conselleria de Sanidad, hay cuatro heridos por quemaduras, tres de ellos graves, y entre ocho y diez heridos leves.
De los heridos graves, uno ha sido trasladado en helicóptero al hospital La Fe de València, mientras que los otros dos han sido llevados en SAMU a La Fe y al Hospital Clínico de València. El herido por quemaduras menos graves ha sido trasladado en un soporte vital básico (SVB) al hospital de Sagunto, y los heridos leves han sido llevados al hospital de campaña que se ha habilitado en Jérica, según las mismas fuentes.
Para atender esta emergencia, la Conselleria de Sanidad ha movilizado dos SAMU, tres SVB, tres transportes no asistidos, un helicóptero y un camión de Emergencias con Múltiples Víctimas. Desde Cruz Roja de Castellón han afirmado de que están atendiendo, junto a la Conselleria de Sanidad y a la Guardia Civil, a las primeras personas heridas en la estación de Caudiel, y han señalado que han trasladado a la zona tres ambulancias de soporte vital básico de Cruz Roja.
La circulación ferroviaria de la línea Teruel-Sagunt se encontraba interrumpida entre Masadas Blancas y Barracas debido a que el incendio está próximo a la vía, según ha informado Adif.
Albergues y atención a los evacuados
En el pabellón polifuncional de Viver se encuentran alojadas las personas evacuadas de Bejís y Torás, y Jérica acoge a los evacuados de Teresa que lo han necesitado. La alcaldesa de la localidad, Nieves Simón, ha lanzado un mensaje de calma a la población, el mismo que le han trasladado desde el Puesto de Mando Avanzado (PMA), pero siempre “prestando atención a la evolución del fuego”.
En Jérica los vecinos también podían ver ese gran resplandor rojo y el humo negro, pero el Ayuntamiento ha pedido calma en un bando, a la espera de la evolución y el avance del fuego. Por su parte, el Ayuntamiento de Bejís ha informado de que en principio el fuego no ha afectado a ninguna vivienda del municipio.
Cruz Roja está atendiendo a un centenar de personas que se encuentran en el albergue provisional de Viver, con “solidaridad y humanidad en estos duros momentos”. La vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Aitana Mas, ha indicado que se está trabajando para ofrecer plazas para realojar a todas las personas evacuadas por el incendio.
La previsión meteorológica de cara al miércoles es más favorable, lo que podría facilitar las labores de extinción a los medios terrestres y aéreos. Está previsto que estos últimos se incorporen paulatinamente al amanecer.
Alegría por la vuelta a casa
Las cerca de 1.500 personas desalojadas a causa del incendio forestal de la Vall d’Ebo (Alicante) podrán regresar a sus casas “de manera escalonada por razones de seguridad” una vez se ha superado la fase “más conflictiva” del fuego gracias al “aliento” que ha supuesto la lluvia caída en las últimas horas sobre la zona.
“Es una alegría para muchas familias (...), es muy importante que las personas desalojadas puedan volver a sus casas”, ha afirmado en declaraciones a los medios el ‘president’ de la Generalitat, Ximo Puig, tras presidir a última hora de este miércoles la reunión del Cecopi para actualizar la situación de los incendios que afectan a la Comunitat Valenciana.
Se trata de las poblaciones de Famorca, Facheca, Tollos, Beniaia, Benimassot, construcciones de la zona de la Garrotxa, Benirrama y Beniali (Vall de Gallinera) y 10 construcciones en Castell de Castells, que suman 1.500 personas en total.
Los primeros realojos, que se llevarán a cabo “poco a poco”, serán los de las viviendas de la Vall de la Gallinera, según ha informado por su parte el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat.