¿Importa el tipo de jabón o desinfectante que usemos?

¿Importa el tipo de jabón o desinfectante que usemos?

Dado que el COVID-19 es un virus, utilizar un jabón antibacteriano no te va a ofrecer ninguna ventaja sobre otros jabones.

Los productos de limpieza e higiene se están vendiendo como la espuma desde que empezó la crisis del coronavirus: jabón, desinfectante de manos, toallitas con alcohol... Pero ¿cuál de todos esos productos es mejor para protegerse de este nuevo coronavirus?

Antes de nada, hay que comprender cómo se transmite el virus. “El coronavirus se expande a través de gotículas”, expone el especialista en enfermedades contagiosas Carl Fichtenbaum, de la Universidad de Cincinnati. “Son partículas microscópicas que contienen virus, proteínas, carbohidratos y otros materiales. Recorren por el aire distancias normalmente inferiores a un metro”, explica.

Si alguien tose o estornuda, estas partículas portadoras del virus viajan por el aire. Las más pequeñas pueden ser inhaladas y los expertos consideran que es una de las vías de transmisión del COVID-19.

Fichtenbaum señala que las secreciones nasales y de saliva también provocan la transmisión del virus, por ejemplo, al tocar un pañuelo usado o al compartir bebida con una persona infectada. “El virus también se transmite de mano a mano o al tocar superficies [contaminadas]”, añade.

Si tus manos entran en contacto con muchas personas y superficies a lo largo del día, es muy complicado que no tengan gérmenes (no solo el coronavirus). Por eso la higiene es uno de los mejores modos de evitar contraer la enfermedad.

La mejor forma de lavarse las manos es la de toda la vida

  Lavarse las manos es una de las principales medidas para evitar la transmisión del coronavirus.SEAN JUSTICE VIA GETTY IMAGES

Algunas formas de lavarse las manos son mejores que otras, afirma la doctora Neha Vyas. Sin ir más lejos, el desinfectante de manos debe ser tu segunda opción, ya que el jabón es lo más efectivo. Deberías lavarte las manos con jabón durante al menos 20 segundos.

Dato interesante: da igual qué tipo de jabón uses. Dado que el COVID-19 es un virus, utilizar un jabón antibacteriano no te va a ofrecer ninguna ventaja sobre otros jabones.

“No existen pruebas de que los jabones antibacterianos sean mejores que cualquier otro jabón. Lo que importa es lavarse las manos durante al menos 20 segundos. La combinación del jabón y la acción mecánica de frotar funciona [para eliminar los virus de las manos]”, expone Fichtenbaum.

No existen pruebas de que los jabones antibacterianos sean mejores que cualquier otro . Lo que importa es lavarse las manos durante al menos 20 segundos
 

Pero, claro, no siempre tienes acceso a jabón, agua y un lavabo. Ahí es donde entra en juego el desinfectante de manos. Si puedes llevar un bote pequeño y usarlo después de entrar en contacto con gente y superficies, estarás más protegido que quienes no lo hacen.

“Probablemente valga cualquier producto que tenga un 60% de alcohol o más”, indica Vyas.

Los desinfectantes sin alcohol también se están vendiendo en masa, pero los CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades) los desaconsejan. Los CDC recomiendan agua y jabón porque es un método más efectivo para acabar con ciertos gérmenes, incluidos los coronavirus. El desinfectante también es menos efectivo si tienes las manos sucias o con grasa.

Si usas desinfectante, echa un vistazo a las instrucciones y échate en la palma de la mano la cantidad recomendada por el fabricante. Frótate ambas palmas, así como los dorsos y el espacio entre los dedos para desinfectar toda la superficie de las manos. Cuando se seque, debería ser completamente efectivo. Si tienes suciedad y grasa en las manos, es mejor que te limpies un poco con un pañuelo antes de usar el desinfectante.

En resumen: lávate las manos tan a menudo como puedas con agua y jabón si lo tienes a mano y, si no, usa desinfectante de manos con alcohol. Y sí, es complicado, pero deja de tocarte la cara.

Este artículo fue publicado originalmente en el ‘HuffPost’ Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.