Ikea da las claves para diferenciar su bolsa Frakta de la 'copia' de Balenciaga
La compañía asegura que la suya es 'The Original'.
Hace unas semanas la firma de lujo Balenciaga sorprendió al presentar un nuevo bolso azul brillante al que muchos rápidamente identificaron con la bolsa FRAKTA de Ikea.
El parecido razonable entre ambos los llevó a enfrentarse cara a cara en redes sociales, a protagonizar múltiples memes y a ocupar titulare en medios de todo el mundo. Las diferencias visuales eran muy pocas, la clave estaba en la etiqueta. Si la bolsa de Ikea se vende en España por 0,50 céntimos, el bolso de Balenciaga cuesta 1.695 euros.
La respuesta inicial de la compañía fue satisfactoria. "Estamos profundamente halagados de que la bolsa de Balenciaga se asemeja a la icónica bolsa azul Ikea sostenible por 99 centavos. ¡Nada supera la versatilidad de una gran bolsa azul!", declaró un representante de la compañía en today.com.
Una semana después de aquello, Ikea ha decidido volver a hablar y se ha sumado al carro de las bromas originadas tras el parecido. En colaboración con la agencia sueca Acne, responsable de su comunicación corporativa, ha difundido un comunicado en el que ayuda a sus clientes a diferenciar la bolsa Frakta The Original de la copia de Balenciaga.
CÓMO IDENTIFICAR UNA BOLSA FRAKTA ORIGINAL.
1. Sacúdela. Si cruje, es la auténtica.
2. Multifuncional. Puede transportar un equipo de hockey, ladrillos o incluso agua.
3. Tírala en la tierra. Una auténtica FRAKTA se puede limpiar con una manguera de jardín cuando está sucia.
4. El precio. Sólo 99 dólares (0,50 euros en España).
"Quería actuar con rapidez, así que al día siguiente nos pusimos en contacto con nuestro cliente y le dije: 'Tenemos trabajo creativo que hacer", contó Johan Holgrem, director creativo de ACNE, a la web especializada creativity-online.com.
Así llamaron al fotógrafo Anders Kylberg para tomar imágenes de la bolsa Frakta y para ello recurrieron a un estudio. El objetivo era darle la misma presencia que las del bolso de Balenciaga. A Holmgren no sólo no le ofendió la copia de Balenciaga, sino que además le pareció brillante. "Me gusta el coqueteo y pensé: '¿Por qué no coquetear?' Y lo hicimos", aseguró.