Iglesias y Montero denuncian ante la Policía estos mensajes de odio contra sus hijos
En uno de los mensajes, publicado en Twitter, se amenazaba con "inflar a hostias" a sus hijos en el colegio.
Pablo Iglesias e Irene Montero han presentado este lunes dos denuncias ante la Comisaría del Congreso de los Diputados por un delito de incitación al odio y a la violencia contra sus tres hijos y por el acoso que sufren en su propia casa El vicepresidente segundo y la ministra de Igualdad han aportado como pruebas algunos mensajes de Twitter en los que dos usuarios señalan a los menores de edad, unos hechos por los que solicitan la apertura de una investigación y han relatado cómo un grupo de personas lanzó objetos al interior de su hogar una madrugada.
Una de las denuncias, a las que ha tenido acceso El HuffPost, es en nombre también de sus hijos, Manuel, Leo y Aitana, y aporta como pruebas algunos tuits referidos a los menores. En uno de ellos, del pasado 18 de agosto, la usuaria @Belonavox se planteaba: “Me pregunto a qué colegio pretenderán llevar el coleta e Irene a sus hijos porque van a ser carne de colleja”.
Otro usuario, @knox_es, contestaba: “Cuando lo anuncien llevaré a mis hijos a ese colegio para que les inflen a hostias”.
El texto de la denuncia lamenta, entre otras cuestiones, la repercusión y los retuits que tuvieron ambas publicaciones y solicitan que “se realicen cuantas investigaciones sean necesarias para esclarecer los graves hechos”.
Otra denuncia por acoso en su propia casa
En la segunda denuncia, interpuesta sólo por Pablo Iglesias, hace referencia a los hechos ocurridos de madrugada el día 22 de agosto en su vivienda familiar. Después de una presencia continuada de manifestantes desde hace semanas en los alrededores de su casa, ese día a las 3:00 de la madrugada se divisó a cuatro personas merodeando por los alrededores “profiriendo insultos y comentarios soeces contra mi persona”. Además, se arrojaron distintos objetos al interior de la vivienda.
La Policía Nacional que custodia la casa de Iglesias y Montero avisó a la Guardia Civil, pero no se pudo interceptar al grupo de personas. Por eso el vicepresidente segundo solicita que se hagan las investigaciones oportunas y se actúe.
La familia interpone estas denuncias sólo unos días después de tener que abandonar Asturias durante sus vacaciones “por el acoso de la extrema derecha” que sufrieron allí, visibilizado en pintadas donde podía leerse “Coletas rata” o en el boicot a un restaurante por darles de comer, cuando ni siquiera llegaron a entrar.