Iglesias confirma que habrá subida de impuestos para las clases altas
El vicepresidente del Gobierno prefiere más sanitarios, rastreadores y docentes en Madrid, antes que incrementar las medidas policiales
El vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias (Unidas Podemos) ha confirmado esta mañana que habrá una subida de impuestos para las clases más altas. Contradice así a la otra vicepresidenta económica, la socialista Nadia Calviño, quien ayer dijo que “no hay ninguna decisión tomada” sobre la posibilidad de subir el IRPF así como el Impuesto de Patrimonio a las rentas más altas, como se persigue desde su socio de Gobierno.
En el mismo lugar donde ayer hizo estas declaraciones la ministra, en La hora de la 1, Iglesias ha dicho hoy lo contrario. Ha confirmado que se trabaja en “avances fiscales”, traducido en subidas de impuestos, para grupos minoritarios que ganan más.
“Fíjese, le digo que habrá medidas de justicia fiscal que contribuyan a reducir a desventaja competitiva de siete puntos con respecto a Europa. Es algo que ya dijo la ministra Yolanda Díaz cuando los empresarios le decían que querían ERTES y que no suban los impuestos: pues las dos cosas son complicadas. La subida de impuestos es un concepto confuso”, ha dicho, poniendo por ejemplo a la propia RTVE, donde no es igual si le suben el sueldo a un operador de cámara que a un jefe de informativos.
″¿La gente que está en una situación más vulnerable hay que subirle los impuestos? No. Pero en este país hay una minoría que en un contexto de crisis creo que es importante que se esfuerce un poquito más”, señala, apuntando que en materia de ingresos el país no está tan mal “por las ayudas europeas”.
″¿Se van a producir subidas de impuestos a esas minorías que ganan más?”, inisste ha presentadora, Mónica López. “Va a haber medidas en esa dirección”, confirma el líder de Podemos.
Precisamente ahondando en los presupuestos por venir, ha dicho que “como partido estamos muy satisfechos con el trabajo y se va a notar que estamos en la preparación de los presupuestos”. “Pronto” habrá “novedades”, ha dicho, del trabajo que están llevando a cabo los dos equipos negociadores, de PSOE y Unidas Podemos, para acabar las cuentas.
“Tenemos razones para estar satisfechos”, ha enfatizado, tras repetir que su intención es negociar primero con las fuerzas que ayudaron a que prosperase la moción de censura contra Mariano Rajoy y, luego, con otras fuerzas, con Ciudadanos en el punto de mira. Si no duerme tranquilo, ironiza, es porque tiene tres hijos pequeños, no porque ceda a bloques que desvirtúen las apuestas pactadas con Pedro Sánchez. Un programa “muy distinto” al del tripartito de la derecha que Gobierna en lugares como Andalucía.
También se ha felicitado de la nueva ley de teletrabajo, que mañana va al Consejo de Ministros, quinto acuerdo con los agentes sociales y económicos logrado por la ministra Díaz, que entiende que es una respuesta necesaria a una nueva realidad laboral. “Estamos orgullosos de que este Gobierno sea el que más está avanzando en materia laboral con el consenso de empresarios y sindicatos”, destaca.
No le gusta el plan de Ayuso
A Iglesias, además, no le convence el plan de Isabel Díaz Ayuso (PP) para atajar el coronavirus en la Comunidad de Madrid. Cree que el “principal instrumento” para salir de la crisis son “los trabajadores públicos, médicos, enfermeros, rastreadores, profesores, los empleados del transporte público... y eso implica seguramente tomar medidas que van en una dirección muy direfente a la del bloque de la derecha en Madrid”. “Los trabajadores públicos que van a ser fundamentales para seguir combatiendo esta pandemia no son polícias y militares, son médicas, enfermeros y profesores”, insiste.
“Mucha gente”, dice, “tiene una sensación de preocupación”, porque “no es sensato” que les digan desde la administración regional que deben elegir entre ser “virus o vacuna”. “Muchos trabajadores de Vallecas o Carabanchel tienen que tomar el metro con mucha gente y no hay derecho a que se le diga eso”, remarca.
Asume que no vale con dar la orden de confinamiento, que la contención sólo no basta, como en primavera, pero se duele de que “muchos trabajadores tienen la sensación de que pueden ir a servir cañas al centro pero no llevar a sus hijos al parque”.
No lo ha dicho en primera persona, pero entiende que se hable de estigmatización, y denuncia que se diga que una de las causas de la pandemia son “los niños extranjeros” o se “criminalice la pobreza”. Al Gobierno de Ayuso y Aguado se les dieron 3.400 millones de euros para contratar personal sanitario y personal docente, ha recordado, y no lo han hecho.
Sobre el estado de alarma, ha tendido de nuevo la mano a todas las comunidades que lo quieran solicitar.
Una república no se hace con 35 diputados
Iglesias ha reconocido diferencias son Sánchez en cuanto a su visión republicana de España, pero asume que no puede lograr más que el debate con sus 35 diputados. Sin embargo, entiende que la propia sociedad y las bases del PSOE irán haciendo que el debate se haga necesario, con casos como el del rey emérito. “La pandemia ha puesto sobre la mesa un debate republicano muy obvio”, “si se comete un delito debe ser juzgado y cesado”, pero también hay “más elementos que se abren paso: como la defensa de lo público, como la sanidad y la educación, valores que tienen que ver con la modernización, que España no puede seguir dependiendo de áreas como el ladrillo o el turismo...”. Todo va de la mano, a su juicio.
Ese “empuje” de la sociedad hace que “discuta mucho” con los responsables del CIS, confiesa, porque él sí es partidario de preguntar a los españoles su opinión sobre la monarquía. “Decir que no está preocupada es decir que los que estáis preocupados sois vosotros”, sostiene, porque el debate “está en la calle”. De ahí que diga que le parece “bastante ridículo” que la pregunta se obvie de la encuesta más determinante de España.
Y sobre la financiación de Podemos, el vicepresidente segundo del Gobierno y secretario general de Podemos se ha ofrecido a “declarar” de forma voluntaria ante los tribunales “si eso contribuye a aclarar” la financiación de la formación. “La clave es que lo aclaren los jueces: un político en la tele puede decir cualquier cosa”, ha sostenido en la entrevista, en la que ha defendido las cuentas de su partido aludiendo que, “con el tamaño” de sus “enemigos”, Podemos no puede permitirse tener “ni una cuenta mal”.