Huelga de transportistas: qué, cuándo, cómo y dónde
El Gobierno ha hecho un llamamiento a la tranquilidad y asegura que no habrá desabastecimiento alimentario en España.
El sector del transporte inició el pasado 14 de marzo un paro indefinido, tras considerar que las condiciones laborales son “inadmisibles” y que, unido el aumento del precio de los hidrocarburos como consecuencia de la guerra en Ucrania, han supuesto el paso definitivo para los transportistas.
Desde la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional aseguran que el 90% de las empresas de transporte se encuentra en una situación de “quiebra total” y reclaman al Gobierno de España el cumplimiento de varias exigencias.
Los camioneros han reclamado a los ministerios de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Trabajo y Economía Social que se prohíba la contratación de los servicios de transporte por debajo de los costes de explotación y que la carga y descarga la puedan desempeñar los propios conductores y autónomos.
¿Quién ha convocado la huelga?
El paro indefinido ha sido convocado por la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional, pero no puede ser considerada una huelga porque la iniciativa no la han llevado a cabo los propios camioneros.
No todas las organizaciones de transportistas se han sumado a la movilización y, de hecho, la Confederación Española de Transportes de Mercancías (CETM), que tiene en su haber la gestión de 65.000 compañías y 260.000 vehículos, se muestra contraria a la iniciativa y defiende que “no es el momento”.
Pese a no apoyar el paro, el organismo mayoritario ha amenazado este lunes al Gobierno con permitir que sus asociados puedan unirse al paro, en el caso de que desde el Ejecutivo central no aprueben subvenciones que permitan rebajar los precios de los carburantes que están afectando gravemente a los transportistas.
Otras organizaciones sindicales como CCOO también aseguraron que, pese al paro, para resolver los problemas del sector, es necesario diálogo y acuerdos con todos los interlocutores: “De todo esto es de lo que hay que hablar, de cómo dignificamos el sector y lo hacemos viable pero en una mesa y no con parches al ritmo de convocatorias de huelga”.
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha reiterado este lunes que “no hay ninguna huelga convocada” y cree que lo que se debe analizar son las causas: “Lo que hay que ver, más allá de caracterizar de dónde viene o deja de venir la llamada al paro, es si hay causas. En este caso, las causas están”.
¿Cuándo empieza la huelga y hasta cuándo se llevara a cabo?
El paro organizado por la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional arrancó el pasado lunes 14 de marzo, con la previsión de la organización de que 75.000 camiones secundaran el paro.
La plataforma convocante ha anunciado que el paro será indefinido, en el caso de que el Gobierno de España no acceda a aplicar las exigencias con las que proteger al sector del transporte.
Tras la infructuosa reunión del pasado miércoles entre la ministra Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez y el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC), el Ejecutivo ha vuelto a sentarse este lunes con el organismo de transportistas y alcanzó un acuerdo para aplicar una reducción efectiva del precio del gasóleo para los trabajadores.
El Gobierno de España anunció minutos después de la mesa de negociación que destinará 500 millones de euros, con una bonificación que estará sustentada por el presupuesto público y otra bonificación a cargo de las distribuidoras o comercializadoras de combustibles.
Una medida que, salvo para la CNTC, no ha convencido a la plataforma convocante del paro y, lejos de mitigar las protestas, tres federaciones nacionales de transportistas han anunciado que se unirán a los paros, para buscar un acuerdo que proteja a los trabajadores.
¿Por qué protestan los transportistas?
La plataforma convocante del paro ha exigido al Gobierno de España que cumpla con varias medidas con las que pretenden terminar con la inseguridad en las carreteras y la falta de vías de descanso para todos los trabajadores.
Entre las propuestas piden al Ejecutivo central que establezcan la jubilación a los 60 años y la anticipada a los 58 para conductores profesionales, que tenga en consideración los accidentes y las enfermedades laborales o que haya un aumento de la vigilancia en los polígonos y áreas de servicio.
Además también creen que desde el Gobierno se debe contar con el sector para la aplicación de restricciones a la circulación de camiones por condiciones meteorológicas o por motivos vacacionales y festivos.
A dichas medidas, también se le suma la petición de rebaja de los impuestos sobre los carburantes. La Asociación del Transporte Internacional por Carretera (Astic) y la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (Ceees) han instado al Gobierno a aprobar una reducción de las tasas.
Ambas patronales han considerado “imprescindible” una revisión a la baja de la carga fiscal de los hidrocarburos, con el objetivo de mitigar la situación que atraviesa la economía española y, en general, los sectores del transporte y de las estaciones de servicio, en particular.
¿Qué opina el Gobierno de España?
La titular de Transportes, Raquel Sánchez, acusó a los convocantes de apoyar las intenciones que tienen la ultraderecha y el presidente ruso, Vladimir Putin, de dividir los países europeos. Unas palabras que enfadaron a los trabajadores del sector y que ha desembocado en un aumento de las movilizaciones.
En la segunda reunión del Ejecutivo central con el sector, que se lleva a cabo este lunes, se intentará acordar un paquete de ayudas para los camioneros que alivie los altos costes de la gasolina, tal y como han hecho los países vecinos, Francia y Portugal.
En la reunión celebrada este lunes con la CNTC, el Gobierno ha planteado la posibilidad de aportar 500 millones de euros de las Cuentas públicas y por parte de las distribuidoras de combustibles, para relajar las presiones económicas con los carburantes a los transportistas. Pero no ha sido suficiente para frenar el paro.
Tal y como detalló hace una semana el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya trabajan en un plan nacional que sirva para paliar las consecuencias derivadas de la guerra de Ucrania, entre ellas el aumento de las facturas de la electricidad, del gas y de los carburantes. Un plan que tiene previsto que llegue al Consejo de Ministros del próximo 29 de marzo.
¿Hay riesgo de desabastecimiento?
Uno de los principales temores ante la guerra en Ucrania y el paro indefinido de los transportistas es el de un posible desabastecimiento. Algo que, aunque, desde el Gobierno y algunas cadenas de supermercados se ha descartado, está generando dudas en la población.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, aseguró el pasado 15 de marzo que no habría problemas de suministro gracias al sector agroalimentario español: “Está asegurado el abastecimiento alimentario en nuestro país”.
Pese a que desde el Gobierno aseguran que no habrá problemas de desabastecimiento, el sector que más está sufriendo el paro está siendo el de la alimentación. Ante el temor de que se acaben algunos productos, los ciudadanos están agotando algunos productos como la leche o el aceite.
Aunque las cadenas de supermercados también reconocen que no hay problemas de suministro de los artículos más demandados, algunos estantes permanecen vacíos, algo que ha generado una pequeña psicosis entre los españoles.