Hollywood Studio Club: la residencia para señoritas en la que vivió Marilyn Monroe
Este edificio californiano esconde entre sus paredes algunas de las historias más desconocidas del mundo del cine.
Tanto hoy, en la era de La la land, como a mediados del siglo XX, Los Ángeles (Estados Unidos) siempre ha sido un nido de camareros y dependientes que buscan triunfar en el mundo de la actuación.
Cuando Hollywood era una fábrica de sueños con mucho de artesanía y talento innato, la mayoría de las actrices que quisieron triunfar en el celuloide pasaron por un lugar muy especial: una especie de residencia de estudiantes, a medio camino entre el hotel y la casa de fraternidad de las universidades de la Costa Este, que las marcaría de por vida y donde se forjaron grandes amistades. Se llamaba Hollywood Studio Club y ocupaba una gran casa de tres plantas en el número 1215 de Lodi Place, en la avenida Lexington.
Hasta allí llegó Marilyn Monroe en 1948. Ella fue una de las más de 10.000 residentes que encontraron en aquel lugar —fundado en 1916— hermandad, seguridad y tranquilidad entre sus compañeras, todas mujeres. Fundada en 1916 por Eleanor Jones y patrocinada por los grandes estudios, la creación definitiva de la residencia fue un intento de lavar la imagen de las productores, acusados de rozar casi el proxenetismo con las jóvenes actrices de la época.
Marilyn no fue la única que pasó por Hollywood Studio Club: allí convivieron prestigiosas actrices como Kim Novak, Sharon Tate o Maureen O'Sullivan. Entre aquellas paredes aprendían a actuar, bailar o tocar el piano y disfrutaban de habitación, duchas, lavandería y comida por una cuota anual de 2 dólares... que no todas podían pagar.
Hollywood Studio Club acabó cerrando en 1975 por falta de presupuesto, pero el espíritu de su fundación sigue vivo y el edificio es considerado uno de los Lugares Históricos de Estados Unidos (hoy en día forma parte de Job Corps, una firma que ofrece talleres educativos y formación gratuita).