Guía para entender el caso Alcàsser
Miriam, Desirée y Toñi desaparecieron en 1992.
La desaparición de tres adolescentes en la localidad de Alcàsser (Valencia) en el año 1992 golpeó a la sociedad española. El caso generó un interés desmesurado en la gente, y los medios de comunicación le dieron una cobertura diaria al asunto durante los 75 días de búsqueda y tras el hallazgo de los cuerpos de Miriam, Desirée y Toñi.
A pesar del juicio a Miguel Ricart y de que la Guardia Civil seguía buscando a Antonio Anglès, el otro culpable de las muertes, empezaron a barajarse varias teorías sobre qué les había sucedido a las jóvenes. A día de hoy, Anglès sigue en la web de la Interpol como una de las personas más buscadas del mundo y nadie sabe dónde está Ricart, que salió de prisión en 2013.
El 13 de noviembre de 1992 Miriam, Desirée y Toñi, de 14 y 15 años, salieron de fiesta a la discoteca Coolor de Picasent (Valencia). Las adolescentes decidieron volver a casa haciendo autoestop en la carretera que unía la Picasent con Alcàsser, la localidad en la que ellas vivían. Regresar así a casa tras una noche de fiesta era algo habitual por entonces en la zona. Fue lo último que se supo de ellas.
Tras 75 días de búsqueda, el 27 de enero de 1993 un apicultor vio en Tous, en el paraje La Romana, un brazo. La Guardia Civil acudió a la llamada y encontró enterrados los cuerpos de las tres jóvenes. La autopsia desveló que habían sido secuestradas, violadas, torturadas y asesinadas.
-La desaparición. 13 de noviembre de 1992.
-El hallazgo de los cuerpos. 27 de enero de 1993.
-Las detenciones. 27 de enero de 1993.
-El juicio. Entre el 12 de mayo de 1997 y el 30 de julio de 1997. Fueron 49 sesiones. La sentencia se dictó el 5 de septiembre de 1997: Miguel Ricart fue condenado a 170 años de prisión por rapto, violación y asesinato con agravantes. Además, se le impusieron las costas del juicio y una indemnización de 300 millones de pesetas a las familias de las víctimas.
-El final de la condena. Ricart fue liberado el 29 de noviembre de 2013 con la revocación de la doctrina Parot. Pasó 20 años en prisión.
Las tres jóvenes. Miriam García Iborra (14 años), María Deseada Hernández Folch ‘Desirée’ (14 años) y Antonia Gómez Rodríguez ‘Toñi’ (15 años).
Miguel Ricart. El único de los responsables que fue a prisión por el crimen. Ricart fue al cuartel de la Guardia Civil en calidad de testigo. Se encontraba en la casa de su amigo Antonio Anglès cuando la Benemérita fue a detenerlo. Esa misma noche confesó su participación en el crimen, aunque en el juicio cambió su versión: aseguró que los agentes le habían presionado para que hablase y que no participó en el crimen.
Antonio Anglès. Sigue en busca y captura por la Interpol por el rapto, la violación y el asesinato de las tres adolescentes. Se sospecha que huyó en un barco como un polizón desde Portugal. Su pista se habría perdido en Irlanda.
Porque era el primer caso de la desaparición de unas niñas que se hizo conocido. Además, como se analiza en El caso Alcàsser (la serie documental de Netflix), todo era nuevo para los medios de comunicación, especialmente para la televisión: las cadenas generalistas habían nacido apenas dos años antes y lo abordaron de la peor manera posible, hasta el punto de que los expertos apuntan que con la cobertura de este caso nació la telebasura. Se hicieron programas especiales —como Quién sabe dónde o De tú a tú— en los que se incluían, incluso, llamadas en directo de supuestos testigos oculares.