Garamendi (CEOE), sobre la reforma laboral: "Nos estamos jugando las cosas de comer"
El presidente de la confederación de empresarios pide al Gobierno que "se aclaren" y adelanta que solo quiere sentarse con un interlocutor.
El mismo día que los socios del Gobierno de coalición se sientan a la mesa para negociar los futuros cambios en la legislación laboral, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha demandado al Ejecutivo que “se aclaren”. El líder de la confederación empresarial ha lanzado esta petición en los micrófonos de Onda Cero, desde donde también ha advertido que “nos estamos jugando las cosas de comer”.
Garamendi ha explicado durante su entrevista con el periodista Carlos Alsina que la patronal quiere negociar con un “interlocutor serio”. En este sentido, el presidente de la CEOE ha adelantado que prefieren sentarse a la mesa con un único interlocutor que sea el Gobierno, “no con uno, ni con ocho, ni con nueve”. Una afirmación que ha aterrizado tras la serie de desencuentros entre los departamentos de la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, y la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, en esta materia.
De hecho, a la pregunta de Alsina de con qué parte del Gobierno se sentiría más cómodo negociando, Garamendi ha replicado con una clásica frase. “Es como si te preguntan: ¿a quién quieres más? ¿A papá o a mamá?”. A este respecto, Garamendi ha reiterado que buscan esa única voz del Gobierno, pero que se atenga a las peticiones de organismos financieros como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o las líneas de la Comisión Europea.
Sobre la temporalidad
De igual forma, Garamendi ha vuelto a mostrar su rechazo a medidas como fijar un tope del 15% en los contratados temporalmente por las empresas. El líder de la CEOE ha asegurado que “la temporalidad no tiene por qué ser precaria” y ha apuntado que ya se ha producido una reducción en el sector privado desde la reforma del 2012, del 30% al 21%, y que en la Administración Pública esa tasa se sitúa en el 30%.
Nuevamente, el mandatario de dicha patronal ha apuntado que la situación económica actual tras la pandemia no es la adecuada para realizar grandes modificaciones en la legislación laboral. “Estamos en un momento delicado de la economía”, ha añadido.