La imagen de este perro ha traspasado las fronteras de Turquía. Su historia bien recuerda a la del japonés Hachikō, que se llevó a la gran pantalla en 2009 (Siempre a tu lado, Hachiko), pero en esta ocasión hay final feliz.
Este golden retriever presenció cómo los sanitarios atendían a su dueña en casa, y finalmente tuvieron que trasladarla en ambulancia hasta el hospital. Sin querer despegarse de ella y con una mirada cargada de tristeza y preocupación, intentó entrar en el vehículo, pero por razones obvias los médicos no se lo permitieron.
Una vez que la ambulancia emprendió su camino, el perro comenzó a correr tras ella, sin flaquear el ritmo en varias manzanas, y logró llegar al mismo tiempo que su ama al centro hospitalario.
Al abrir la puerta del vehículo, el can intentó entrar de nuevo, pero desistió en su empeño cuando vio que la mujer salía en silla de ruedas de él. La acompañó a su lado hasta la puerta del hospital y, una vez allí, se quedó parado viendo cómo se alejaba.
La historia terminó de la mejor forma posible: cuando su dueña recibió el alta, él la esperaba a su salida en la puerta. Había estado allí todo el tiempo demostrando su fidelidad, paciente y confiado en que regresaría con ella. Y así fue.
Las imágenes han llegado a los telediarios de todos los rincones. Puedes verlo aquí:
También conocido como Perro Pastor Sueco, se cree que esta raza tiene casi 1000 años de historia.