Fallece en un avión el niño al que el doctor Cavadas extirpó un tumor más grande que su cabeza
Pocos días después de la última cirugía.
Finalmente, no pudo ser. Emmanuel, el niño de 10 años al que el cirujano Pedro Cavadas le extirpó un tumor más grande que su cabeza, ha fallecido en pleno vuelo cuando viajaba de Madrid a la ciudad marroquí de Casablanca.
Según informa el diario El Mundo, el avión tuvo que aterrizar de urgencia en el aeropuerto de Málaga, ciudad donde se le practicará la autopsia. Al parecer, el niño, de nacionalidad congoleña, comenzó a sentirse mal durante el vuelo, aunque la causa del fallecimiento no ha sido aclarada aún.
La operación había resultado exitosa en un primer momento. Es uno de los tumores “más grandes que hemos intervenido”, aseguró en una entrevista con Efe el propio Pedro Cavadas. Emmanuel llegó a Valencia “malnutrido, muy débil y con un problema de coagulación no diagnosticado de origen que le hacía sangrar en cada cura”.
El caso de Emmanuel, con un fibroma osificante gigante de base de cráneo, llegó a la Fundación Cavadas a través de una entidad que tiene una clínica en el Congo y no podía abordar una intervención tan compleja ya que el tumor, que seguía creciendo, le impedía ver y hablar.
“No tenía vida, ese crío habría durado dos telediarios, estaba condenado a una muerte en muy malas condiciones y relativamente pronto”, ha señalado Cavadas, quien señala que ahora “debería hacer una vida completamente normal. Ahora, por lo menos, tiene cara”.
El proceso previo a la intervención duró varias semanas de estudio y preparación. “No hay muchos tumores que lleguen a este tamaño”, confesaba el doctor, que realizó dos cirugías en ocho días.
En la primera intervención, que duró cerca de diez horas, se le quitó todo el maxilar, la zona entre las órbitas oculares, el paladar y una parte del interior de la boca, que fue reconstruido tras extirpar el tumor. En la segunda, de similar duración, se centró en la parte intracraneal, para quitar la base anterior y media del cráneo y reconstruirlo con sus propias costillas.
Sin embargo, pocos días después, el pequeño Emmanuel no ha podido recuperarse.