Evo Morales proclama su victoria: "Ganamos en la primera vuelta"
El presidente boliviano acusa a la misión de la OEA de dar alas al "golpe de Estado"
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha asegurado que los resultados del recuento realizado hasta ahora por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) ya le permiten cantar victoria. “Ganamos en la primera vuelta”, ha celebrado este jueves, en una comparecencia ante los medios en la que ha insistido en su tesis del “golpe de Estado”.
Morales ha celebrado la “buena noticia” que le ofrecerían los datos, según los cuales la candidatura del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) aventaja en más de diez puntos a la del opositor Carlos Mesa, de Comunidad Ciudadana. El último recuento conocido concede a Morales el 46,8 por ciento de los sufragios, frente al 36,7 por ciento de Mesa.
Morales ha admitido que “no es oficial” aún la victoria y que faltan por contar “unos 120.000 votos”, pero ha considerado insalvable la diferencia y ha instado a sus rivales a asumir la derrota. De no hacerlo, ha agregado, estarían desconociendo “el voto de los más humildes, de los indígenas”, lo que ha catalogado como “una forma de racismo”.
El presidente ha sugerido que también estaría dispuesto a aceptar un vuelco de los datos a última hora. “Si el resultado final dice que vaya a segunda vuelta, vamos a ir”, ha dicho, sobre una posibilidad que incluso ha valorado positivamente por entender que entonces “todos se van a juntar”.
El mandatario, que gobierna Bolivia desde enero de 2006, ha lamentado que ciertos grupos de políticos “insisten en el odio, en el desprecio, en la discriminación”, invitando a la oposición a una “profunda reflexión” sobre lo ocurrido en estos últimos días, marcados por las tensiones políticas y sociales.
Interrogado por los resultados obtenidos por su partido, peores a los de otras citas electorales, Morales ha señalado que “tanta mentira de la oposición” pudo afectar. También ha admitido que pudo haber cometido “errores” y haber sufrido “algún desgaste” tras más de una década en el poder, pero se considera plenamente legitimado para iniciar un nuevo mandato.
Crítica a la OEA
Sobre la dimisión del vicepresidente del TSE, Antonio Costas, que renunció al cargo por su discrepancia con la interrupción del recuento de votos de la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) -detonante de las quejas de la oposición-, Morales ha asegurado que se trata de “un problema interno” dentro de la institución.
El presidente, que ha tachado a Mesa de “criminal” y “cobarde”, ha retado a la oposición a presentar pruebas del presunto “fraude” y ha instado a todos los actores, tanto de dentro como de fuera del país, a “respetar la Constitución”; un mensaje que ha extendido especialmente a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a su misión de observación.
La misión electoral de la OEA ha recomendado que se celebre una segunda vuelta de las elecciones presidenciales que tuvieron lugar el domingo, independientemente de los datos del TSE. Morales ha abierto la puerta a una auditoría, pero ha criticado que se emitan este tipo de opiniones “antes de que termine el cómputo oficial”.
“La OEA en su conjunto debería también evaluar a la misión que ha enviado”, ha añadido el presidente boliviano, quien ha acusado a dicho equipo de sumarse al “golpe de Estado” que se estaría gestando, “interno y externo”. En este sentido, se ha mostrado dispuesto a conversar, pero con condiciones: “Por encima del diálogo está respetar nuestras normas internas”.
Morales ha aprovechado también para criticar la recién creada la Coordinadora de Defensa de la Democracia, a la que se han sumado representantes de partidos políticos, comités cívicos, miembros del Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade). A su juicio, son “un grupo de políticos fracasados” herederos del “golpismo”.
“Somos los llamados a defender la democracia porque nosotros recuperamos la democracia”, ha remachado, con un mensaje a sus seguidores para “no entrar a la provocación y la confrontación”. Morales ha advertido de que quienes no le “acepten” como presidente serán responsables “de cualquier hecho lamentable” que pueda producirse.