Este detalle en la última película de 'Harry Potter' demuestra que Snape no era tan malo como pensabas
Entre tanto hechizo seguramente se te haya pasado.
Si eres seguidor de la saga Harry Potter, seguramente Severus Snape no sea de su agrado. El personaje al que da vida Alan Rickman fue encasillado durante prácticamente toda las películas y libros como el malvado profesor de Artes Oscuras y Pociones que trataba de hacer la vida imposible a Harry y compañía. Era —quitando a Voldemort— el antagonista por excelencia.
Sin embargo, esta teoría daba un giro en la última película, Harry Potter y las Reliquias de la muerte. Parte 2 cuando se mostraba mediante un flashback que Snape había estado protegiendo a Harry durante toda las las entregas porque en su juventud estuvo enamorado de su madre, Lily Potter. Además, el marido de ésta y padre del protagonista, James Potter, se llevaba fatal con Snape ya que ambos eran los más inteligentes de Hogwarts.
Antes de que se desvelara todo eso, también en la última entrega de la adaptación cinematográfica, hay un detalle en la batalla entre el profesor y la profesora McGonagall que muestra que Snape estaba ayudando a Harry y sus amigos y no atacándoles.
En mitad del enfrentamiento, del fuego y los hechizos, parece que Snape empieza rindiéndose frente a McGonagall, sin embargo, en realidad está desviando los hechizos hacia los mortífagos Alecto y Amycus Carrow [aliados de Voldemort], que se encuentran detrás de él y que, en teoría, son sus aliados. Si se te ha pasado, vuelve a verlo aquí.