¿Eres tú, Brad Pitt?
Su doble demuestra que la vida del actor no tiene porqué ser nada fácil.
Hay, al menos, dos Brad Pitt en el mundo. Uno es el oscarizado actor (57 años) y el otro es su imitador, Nathan Meads, con un parecido asombroso al protagonista de Seven. El hombre de 35 años desvela en New York Post que tener uno de los físicos más envidiados de Hollywood no es garantía de nada.
El propio Pitt bromeó en la gala de los premios del Sindicato de Actores en 2020 con su supuesto perfil de Tinder y ahora su doble aparece en el medio estadounidense para decirle al mundo que ligar no es fácil con esa cara, por sorprendente que parezca.
Nathan Meads, que vive en Oxford (Inglaterra), comenzó a trabajar como su imitador hace tres años, después de que le hubiesen repetido hasta la saciedad lo mucho que se parecía al intérprete. La primera vez que lo escuchó fue a los 20 años, y los comentarios siguieron durante diez más, cuenta.
“Hay gente que cree que debo tener alguna vinculación familiar lejana con él, e incluso que mi madre ha tenido una aventura con Pitt”, relata. Su vida es también, en parte, la de una superestrella, ya que hay gente que cuando pasa por su lado mira una segunda vez incrédula, otros que le piden una foto, y luego están los que se las hacen como si él no fuese consciente.
Por eso, durante años el británico estuvo dándole vueltas a la forma de encontrarle un beneficio al parecido, hasta que le llegó la idea. Decidió enviar fotos a diferentes agencias, que mostraron su interés por trabajar con él. Y no le ha ido tan mal: se embolsa, afirma, entre 350 y 690 dólares por imitación.
En una ocasión se puso en contacto con él Dorien Rose, la modelo conocida por su parecido con Angelina Jolie, para colaborar con él. Ella ha sido de las pocas mujeres que se le han acercado porque, como lamenta el imitador, su físico le hace casi imposible conseguir una cita y, por tanto, una pareja.
“Me llevo muchos chascos con las mujeres”, comenta. Cuando ven su perfil de Instagram, siempre intentan que acceda a hacer una videollamada porque no se creen “que sea real”.
Las aplicaciones de citas tampoco le son útiles. Le acusan de tener perfiles falsos, e incluso le han llegado a “acosar” por ello, afirma. En ese campo ya se ha dado por vencido y ha borrado sus perfiles: “Me quedo soltero”.
Aun así, afirma que su mayor amor son sus hijas, y que no está buscando a su “Angelina”.
Ser casi un clon de Brad Pitt no hace que todo sea negativo en su vida. Gracias a ello Nathan Meads se ha paseado por algunas alfombras rojas, lo que le ha permitido conocer a otros famosos, revela. “He sido bendecido con esta buena apariencia (...) Aunque tenemos cuentas corrientes muy distintas”, bromea.
‘Los clones’ no han tenido oportunidad de conocerse, pero a Meads le encantaría, porque admira al actor de Leyendas de pasión en los profesional —“interpreta todos sus papeles de manera brillante”— y en lo personal: “Me parece un auténtico caballero”. De momento, le tocará seguir viviendo esa vida ‘semiparalela’.