ERC y PNV escenifican su decepción con el Gobierno con su 'no' a la reforma laboral
Rufián acusa al Ejecutivo de "presionar" a su partido y Esteban lamenta la "rigidez" en la negociación.
Distinto tono, pero mismo sentido del voto: no. Dos de los socios preferentes del Gobierno de coalición, PNV y ERC, han mostrado desde la tribuna su decepción con el Ejecutivo, que quedará plasmada en la votación de la reforma laboral, que saldrá adelante con el apoyo de Ciudadanos, PdeCAT y UPN.
El más duro ha sido el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, que ha acusado al Gobierno de “presionar” a su formación y de sentar “un precedente peligrosísimo” al llevar al Congreso un acuerdo inamovible.
“El diálogo social está muy bien, la respetamos enormemente y nos parece muy hábil que estén todos. Pero las leyes se hacen en el Congreso, guste más o guste menos. Cuando vienes aquí diciendo que esto es lo que hay y no se toca, no te crees que el Congreso sea la sede de la soberanía popular, sino que es un notario que sella acuerdos. Eso sienta un precedente peligrosísimo que no aceptamos”, ha lamentado.
“ERC no funciona bajo amenaza, esto no ha sido un proceso de negociación, ha sido un proceso de presión y negación. Aquí la posición inexplicable no es la nuestra”, ha agregado Rufián.
El portavoz republicano, dirigiéndose a los trabajadores a los que afectará esta norma, ha criticado que el Gobierno no haya aprovechado la mayoría parlamentaria de izquierdas para recuperar al indemnización por despido anterior a la reforma del 2012 ni para recuperar los salarios de tramitación.
″¿Podían hacerlo? Sí, podían. Porque lo prometieron, porque nosotros se lo proponíamos y porque tenían los números y la mayoría de izquierdas para hacerlo”, ha afirmado.
Rufián ha asegurado que “que esta reforma le guste a la CEOE no es casualidad” y que “es exactamente la reforma que habría negociado y votado Albert Rivera de haber sido vicepresidente”.
También ha negado que “si no se vota” esta reforma laboral “vuelve al reforma del PP”.
Pese a su tono, Rufián ha afirmado que “aunque algunos creen que hoy se acaba el mundo, no se acaba el mundo”. “Mañana vamos a seguir hablando porque somos conscientes de la alternativa”, ha aseverado.
PNV: “Nos gustan los consensos, pero no si se imponen”
Más conciliador, pero no por ello menos rotundo, Aitor Esteban, portavoz del PNV, ha criticado la “sordera” del Gobierno a “los avisos continuos” por parte de sus socios de investidura.
“A nosotros nos gustan los consensos y valoramos lo que se ha hecho, pero no si se imponen en un parlamento democrático”, ha criticado Esteban, quien ha reconocido que “hay cosas positivas” en la reforma.
El portavoz nacionalista vasco ha asegurado que su formación pedía respetar “el reparto competencial” y “el marco vasco de relaciones laborales y el acuerdo interprofesional vasco del 2017″. “Algo que no perjudica a nadie y que concita el acuerdo de los agentes sociales”, ha aseverado.
Esteban ha criticado la falta de representación sindical vasca en la negociación y que el Ejecutivo no mirase al Parlamento mientras se negociaba. “Se lo dijimos a los sindicatos, a la patronal, a Trabajo y se lo advertimos al presidente del Gobierno”, ha explicado.
“Lo han tenido en su mano, saben perfectamente que el contenido no ha sido un problema. El problema ha sido el miedo escénico y la rigidez de alguno”, ha agregado.
Esteban considera “un chantaje intolerable a los representantes democráticos” que la patronal exigiera que no se tocase “ni una coma” del acuerdo en la tramitación parlamentaria. “Se cerraron en banda, se sumaron ministros socialistas y hasta el propio presidente. Es el colmo del antiparlamentarismo”.
El portavoz del PNV no entiende cómo el Gobierno no negoció “la mayoría parlamentaria anteriormente” porque, ha recordado, “corresponde al Parlamento su aprobación”. Tampoco comprende cómo el Ejecutivo no se abre a “hacer retoques sin tocar el núcleo” del acuerdo, “que es lo que importa a Europa”.
Pese al no, Esteban ha afirmado que su partido “no desistirá y aprovechará las oportunidades del trámite parlamentario”.