Sánchez controlará el precio de los tests de antígenos y "lamenta" la polémica de Garzón
Entrevista en la Cadena Ser: el presidente critica el "negacionismo político" del PP y pide que las Cortes convaliden la reforma laboral.
Más pasos. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que se van a tomar medidas para controlar el precio de los tests de antígenos y ha avanzado que en este mes de enero se comprarán 344.000 dosis de los antivirales orales de Pfizer.
Sánchez lo ha desvelado durante una entrevista en el Hoy por hoy de la Cadena Ser, donde ha repasado la situación actual del país, señalando que el pico de la sexta ola llegará durante “estas semanas”.
El jefe del Ejecutivo, además, se ha pronunciado sobre las palabras de Alberto Garzón, en The Guardian. “Lamento la polémica, con eso lo estoy diciendo todo”, ha comentado el socialista, que ha defendido la calidad del sector cárnico en España.
Además, el presidente ha criticado la “oposición negacionista” de la derecha, para pedir a la vez a las Cortes Generales que convaliden el decreto de la reforma laboral, pactada por el Gobierno, los sindicatos y la patronal. No obstante, ha indicado que no se va a dejar arrastrar al barro, como quiere la oposición todos los miércoles en la sesión de control.
Para los próximos dos años de legislatura, ha explicado, quiere estabilidad y ha remarcado que se convocarán las elecciones en diciembre de 2023.
La situación de la pandemia ha centrado buena parte de la entrevista, trasladando Sánchez ese mensaje de que hay que adaptarse a la situación de ómicron, una variante más contagiosa pero “más leve”. Su receta: seguir vacunándose (descarta hacerlo de manera obligatoria) y con medidas de “autoprotección”, como son las mascarillas.
Preguntado por el precio de los test de antígenos -más alto que en otros países de Europa-, el presidente ha señalado primero que se ha conseguido superar la situación anterior del “cuello de botella”, al haber más demanda que oferta. ¿Va a tomar medidas para rebajar esa cuantía? Su respuesta: “Ahora nos meteremos con el control de los precios”.
También se ha adentrado Sánchez un buen rato en la reforma laboral. Sánchez ha cargado contra el “negacionismo político” que practica la derecha y se ha preguntado que qué harían en otros países los partidos de la oposición ante un acuerdo entre los agentes sociales.
Por eso, ha pedido a la oposición que anteponga los intereses general a los de partido y que las Cortes refrenden esa reforma laboral. ”¿Cuáles son sus intereses?”, se ha preguntado el presidente del Gobierno, recordando que los populares han dicho que no a medidas como la subida del salario mínimo o la reforma de las pensiones.
El presidente ha insistido en varias ocasiones en esa idea de “oposición negacionista” y ha pedido al PP “lo obvio y evidente”: cumplimiento del deber constitucional, respeto al diálogo social, educación y rigor. Ha insistido en que no le parecían los más adecuados los perfiles presentados por el PP para el Constitucional, pero que accedió al acuerdo para el funcionamiento de las instituciones.
Otro de los puntos calientes de la entrevista ha sido sobre Alberto Garzón. El presidente ha dicho: “Lamento esta polémica. Hablamos de un sector cárnico de extraordinaria calidad”. Estas palabras, ha señalado, “no se compadecen con lo que está haciendo el Gobierno”. El Ejecutivo, ha resaltado, se expresa en el BOE y en los acuerdos con el sector.
Àngels Barceló le ha preguntado si ha hablado con el ministro de Consumo, a lo que el presidente ha respondido: “Me va a permitir que sobre las conversaciones privadas guarde discreción, pero insisto en expresar mi lamento sobre la polémica”.
El presidente ha confesado, además, que también ha sido un tiempo “muy duro” en los personal, lamentando el ambiente que se encuentra cada vez que va al Congreso, lleno de descalificaciones.
Ante esto, ha lanzado: “No puedo desfallecer, no me lo puedo permitir, no me puedo desanimar”. “España se merece más” que la actitud de la oposición, ha manifestado el presidente.
El presidente también se ha pronunciado sobre los movimientos a su izquierda. Ha indicado que tiene “muy buena relación” con la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y “en general con todos los ministros de Podemos”. Ha dicho que le gustaría que hubiera menos decibelios en la coalición, pero “sólo tengo palabras de agradecimiento para los ministros”. “Todos ellos están contribuyendo a dignificar la vida de los españoles”, ha puesto en valor.
Sobre la futura plataforma de Díaz, Sánchez ha dicho que, “con todo el respeto a su autonomía”, espera que “salga fortalecido el liderazgo” de la vicepresidenta segunda.
El presidente no ha querido concretar una fecha para la próximo reunión de la Mesa de Diálogo con la Generalitat, pero ha aventurado que habrá cita. Ha pedido que se deje trabajar ahora a los equipos.