Néstor Rego, único diputado del BNG: "No hay que dar por seguro nuestro apoyo a Sánchez"
Entrevista al diputado del Bloque Nacionalista Galego, que vuelve al Congreso tras cuatro años y varias legislaturas ausente: "Con un solo diputado se pueden cambiar las cosas".
Aspira a no ser uno más entre 350 diputados. El Bloque Nacionalista Galego (BNG) vuelve a ganar sitio en el Congreso cuatro años y varias legislaturas después, de la mano de Néstor Rego (Vicedo, 1962). Este profesor de instituto en Santiago de Compostela, se mudará pronto a Madrid a sus 57 años. Allí promete “trabajar para que se escuche a Galicia” y “cambiar las cosas, porque con un diputado también se puede”.
Al nuevo congresista por A Coruña se le nota la experiencia docente. Su voz tranquila no vacila a la hora de responder. Apenas sí la eleva para celebrar que “Galicia, como nación vuelva a tener una voz libre en Madrid, tras años sin ella”.
Desde su posición quiere fomentar el debate sobre “el derecho de autodeterminación y la necesidad de más inversiones en mi país”, pero también hablar de cuestiones sociales a nivel nacional. “Me parece increíble que aún no se hayan derogado leyes como la Ley Mordaza, la LOMCE o la Reforma Laboral”.
Rego ocupará uno de los sillones del Grupo Mixto, en la parte más alejada de la Cámara Baja. ¿Qué se puede hacer con un escaño? “Mucho”, apunta veloz. “Se pueden cambiar las cosas y se ve en cuestiones como los Presupuestos Generales”. El político gallego cita un ejemplo que le toca bien de cerca: “En los de 2019, que acordaron PSOE y Podemos pero que no llegaron a aprobarse, Galicia recibía 750 millones de euros. En 2009, con dos diputados del BNG, el Gobierno de Zapatero acordó unos PGE con 2.145 millones para Galicia. No es tanto la cantidad, sino la voluntad y la calidad de las reclamaciones”, declara.
La idea del preacuerdo de Gobierno de coalición firmado por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias parece agradarle, pero no se suma al desfile de emociones de las últimas horas. “Es pronto para hablar tan a largo plazo. El documento es demasiado genérico, vago, aún. Antes de valorarlo conviene conocer el programa”.
Por ello, pide cautela antes de contar con sus siglas como seguro apoyo de este potencial Ejecutivo: “Nosotros ya hemos dicho que en lo que dependa del BNG no gobernará la derecha, como ya hacemos en Galicia. Pero no hay que dar por seguro nuestro voto favorable a Sánchez , que algunos venden la piel del oso antes de cazarlo. Primero hablemos y para ello pondremos la agenda gallega por delante”.
“Este acuerdo exprés de PSOE y Unidas Podemos demuestra que se pudo lograr antes y no se quiso, fundamentalmente por el PSOE, pero también por parte de UP”, añade. Lanza una crítica a ambos partidos por la repetición electoral que, paradójicamente, ha venido muy bien al nacionalismo galego (además de a Vox): “Su desacuerdo dio una gran oportunidad a la extrema derecha. Y en esta ocasión, también a nosotros”, confiesa entre risas.
Precisamente, continúa, “fue el BNG”, quien propició la ausencia de representación de Vox en Galicia, uno de los pocos territorios aún sin ‘explorar’ por la ultra derecha. “En A Coruña fuimos la principal causa de que no entraran, hubo una pelea de votos que nos dio el escaño a nosotros y no a ellos”. Más allá, Rego ve otro motivo: “su ausencia en Galicia, Euskal Herría y su baja representación en Cataluña se debe a su visión ultraespañolista que niega la cultura y el sentimiento nacional de estos territorios. Son países que aunque no siempre manifiesten su conciencia en voto nacionalista, sí tienen una conciencia nacional”.
Lo que no teme el diputado gallego es que su formación atomice, aún más, el voto de izquierda. “Nosotros competimos desde un espacio de izquierda, pero específico, por su componente nacionalista. Por eso nuestro electorado sabe diferenciar y nuestro programa no se sitúa en el mismo espacio que las formaciones de izquierda estatales”.
Con su retorno al Congreso, el BNG inicia un curso político clave que le conducirá a las autonómicas de Galicia, previstas para otoño de 2020. El objetivo, nada oculto por parte del ‘Bloque’, es desbancar del poder al popular Alberto Núñez Feijóo. Pero no de cualquier modo, explica Rego. Descarta “ser parte de un sistema de mera alternancia de partidos” y sí buscar “ser alternativa al modelo del PP, algo que solo garantizamos nosotros”. “El 10-N se vio que Feijóo no tiene mayoría sociológica del voto gallego”, cierra, en un mensaje al presidente de la Xunta.
Sus últimas palabras, en gallego, devuelven al inicio de su discurso. “Que Galicia vuelva a tener voz propia”. Al menos, la de Néstor Rego se oirá en la próxima legislatura.