¿En qué activos podemos invertir en épocas de crisis?
Estos días, 'traders' e inversores se preguntan cuáles son las opciones que tienen para proteger su capital frente a esta situación del mercado.
A lo largo de la historia, los mercados financieros han experimentado diferentes tipos de tendencia donde hemos podido ver cómo la humanidad ha sufrido diversas crisis financieras que han provocado fuertes caídas en los mercados financieros al principio a nivel local y con la llegada de la globalización a nivel global.
Quizás la más conocida de todas fue la crisis bursátil del año 1929, que es conocida popularmente como el crack del 29 convirtiéndose en la gran primera crisis en los mercados de valores del pasado siglo XX. El estallido de esta crisis comenzó con el periodo conocido como la Gran Depresión y afectó inicialmente a la economía estadounidense, aunque rápidamente se extendió al resto del mundo.
Esta crisis financiera fue un paso más en los avatares históricos que junto tras la caída de las antiguas potencias y el resurgimiento de las nuevas en la Primera Guerra Mundial llevaron a desencadenar el incremento de las tensiones entre las diferentes potencias mundiales y la posterior carrera armamentística provocando el horror de la Segunda Guerra Mundial.
A esta crisis le sucedieron muchas otras, como las crisis derivadas del petróleo y las conocidas de comienzos de este siglo como la crisis de las puntocom o la crisis financiera de 2008 tras la caída de Lehman Brothers debido al colapso del sistema financiero generado por las hipotecas subprime.
Una nueva crisis
Durante las últimas semanas, hemos podido observar cómo ha surgido a nivel global una nueva crisis financiera, tal y como podemos observar en el incremento de la volatilidad en los mercados financieros, ya que ésta se ha visto incrementada exponencialmente debido al pánico generado por la pandemia a nivel global del temido covid-19.
Este fuerte incremento en la volatilidad ha causado un crash bursátil en los principales índices a nivel global debido al fuerte deterioro de las previsiones macroeconómicas, al incremento de las tasas de paro tras la proliferación de expedientes de regularización de empleo por el descenso del consumo a nivel global y los confinamientos de la población ordenados por los diferentes países, obteniendo como resultado que casi un tercio de la población mundial esté sufriendo medidas de confinamiento en sus hogares interpuestas como medidas de precaución para evitar la propagación de este virus.
Si al escenario anteriormente descrito, le añadimos una guerra en los precios del crudo que ha arrastrado al oro negro hasta caer hasta los 21 USD por barril de Brent, podemos afirmar que nos enfrentamos a la tormenta perfecta por lo que diversas instituciones financieras y gubernamentales han tomado drásticas medidas inyectando fuertes sumas de capital a los mercados financieros, aunque estos parecen que no reaccionan a dichas medidas.
Por esta razón, muchos traders e inversores estos días se preguntan cuáles son las opciones que tienen para proteger su capital, frente a esta situación del mercado.
Oro
A lo largo de la historia, el oro ha tenido múltiples usos, desde ser utilizado en joyería hasta ser utilizado como componente para productos electrónicos debido a su alta conductividad, pero principalmente ha destacado como moneda de cambio entre diferentes culturas a la hora de comerciar y como medidor de riqueza en función de las reservas disponibles, siendo por lo tanto el principal activo refugio por excelencia.
En tiempos de crisis, los inversores suelen buscar refugio en el oro debido a que goza de una elevada liquidez y que ningún gobierno u organismo tiene el control sobre el precio de este activo, por lo que cuando las tensiones comienzan en los mercados de acciones, gran parte de los inversores deshacen sus posiciones en renta variable para aumentar su exposición al oro esperando a que estos vuelvan a la normalidad, por lo que el precio del oro se aprecia significativamente debido al incremento de la demanda.
Por otro lado, el oro está muy relacionado con el dólar estadounidense, debido a que este cotiza sus onzas en dólares americanos, por lo que si el dólar también se aprecia el valor del oro aumenta también debido al tipo de cambio.
Divisas refugio: Dólar, Franco Suizo y Yen Japonés
Curiosamente, el dólar estadounidense también actúa como divisa refugio cuando hay turbulencias en los mercados financieros dado que los inversores suelen comprar dólares para protegerse ante cualquier eventualidad, debido a que esta es la divisa de referencia a nivel mundial en materia de comercio exterior y que históricamente esta se ha comportado de manera estable mientras que otras divisas se han depreciado considerablemente cuando el pánico inunda a los mercados.
De manera similar, podemos considerar al Franco Suizo como divisa refugio, ya que Suiza además de ser un Estado conocido por ser imparcial en la mayoría de los ámbitos a nivel internacional, también es reconocida como un país estable, con bajos niveles de desempleo con un fuerte sector financiero.
Por su parte, el Yen japonés es también un importante activo refugio a nivel internacional, dado que posee una correlación inversa con los activos de renta variable. Esto sucede principalmente a que el inversor japonés, suele invertir mucho en mercados extranjeros y cuando las cosas se complican, deshacen sus posiciones repatriando los fondos a su país y por lo tanto, el yen se ve apreciado con fuerza debido al incremento de la demanda.
Bonos del tesoro
Otros de los activos refugio por excelencia es el mercado de renta fija, dónde podemos considerar como activos refugio la emisión de bonos por parte de países con la máxima calidad crediticia como el T-Note americano o el Bund alemán.
Debido a este carácter de activo refugio, durante los últimos años, hemos visto cómo estos países en ocasiones han llegado emitir bonos con tipos negativos debido a la alta demanda en los mercados. De esta manera, no solo se han financiado con tipos de interés muy beneficiosos, sino que también han llegado a cobrar a los inversores por comprar su deuda.
¿Son las criptomonedas un activo refugio?
Para muchos inversores, las criptomonedas son el siguiente paso en la evolución financiera. El Bitcoin (BTC) fue la primera moneda digital descentralizada basada en un sistema que funciona sin un banco central o administrador único, siendo por lo tanto un gran avance tanto en el comercio financiero como en la asignación de activos.
Curiosamente, debido a su concepto inicial, se esperaba que este tipo de activos se comportasen como activos refugio, intentando imitar así el comportamiento del oro, aunque por el momento, no estamos apreciando este tipo de comportamiento en estos activos pese a su boom inicial de hace unos años cuando el Bitcoin superó los 19.000 USD de cotización.
Esto puede ser debido a que por el momento, todavía no han conseguido convertirse en monedas como tal, ya que no han logrado implementarse como serios sistemas alternativos de pago entre usuarios y los comercios, siendo vistos por gran parte del mercado como activos meramente especulativos y no como un activo refugio tal y como podemos observar en las últimas sesiones, donde hemos podido encontrar una fuerte tendencia bajista desde mediados del pasado mes de febrero cuando esta crisis saltó de China a Europa.