El rifirrafe de Almeida y Ortega Smith: "Que le vaya bonito"
“Usted hace matonismo político”.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha protagonizado este martes una disputa junto con el portavoz de Vox, Javier Ortega Smith, a quien ha acusado de hacer “un ejercicio de matonismo político en el cual está secuestrando a todos los ciudadanos de Madrid en aras de su interés personal y particular”.
Estas declaraciones tuvieron lugar en el pleno del Ayuntamiento de Madrid tras la intervención del portavoz de Vox después de que su líder asegurara que no iba a apoyar los presupuestos municipales. De hecho, Almeida aplaudía la posición y responsabilidad de Vox en la Comunidad de Madrid ya que “el año que viene es decisivo en la recuperación económica”.
La postura tan cerrada de Vox es algo que ha pillado por sorpresa a la alcaldía y así se lo ha reprochado Almeida durante el pleno a Ortega Smith: “No entiendo qué problema tiene en sentarse a negociar los presupuestos”. De hecho, el alcalde considera que sentarse a negociar es una necesidad para llegar a algunos acuerdos.
“Que Ortega Smith diga en el Congreso ‘que los nacionalistas chantajean, que nos hacen a todos rehenes de sus votos’, cuando lo que está haciendo con sus cuatro votos en el Ayuntamiento, negándose a sentarse con el quipo de Gobierno, es un ejercicio de matonismo político en el cual lo único que busca es su propio interés particular”, ha comentado Almeida en tono enfadado.
Ante esta situación, el alcalde pide a la formación verde que “recapaciten” y que “piensen en los madrileños”. “No pasa nada por sentarse a negociar. No le digo que haga como Monasterio y tenga la capacidad de llegar a un acuerdo, le digo sencillamente que se siente a negociar los presupuestos y si no lo hace que asuma las consecuencias y le diga a los madrileños por qué no se sienta a negociar”, ha sentenciado.
Durante el pleno, Ortega Smith ha aclarado que Vox no renuncia a representar a sus votantes ni les van a “traicionar”, lo que considera que sí que ha hecho el PP, por ejemplo, con el proyecto de Madrid 360. “Es dar la vuelta para llegar al mismo punto de Madrid Central” y por tanto prefieren que no cuenten con ellos para aprobar las cuentas.