El Gobierno de Sri Lanka impone un toque de queda entre nuevas protestas
El mandatario saliente, Rajapaksa, designa al primer ministro, Wickremesinghe, como presidente interino del país.
Las autoridades de Sri Lanka impusieron hoy un toque de queda en Colombo, en medio del resurgimiento de las protestas que reclaman la renuncia del presidente del país, Gotabaya Rajapaksa, y del primer ministro, Ranil Wickremesinghe, anunciadas el pasado sábado.
La medida fue impuesta por el primer ministro en la Provincia Occidental del país, que acoge la capital nacional y foco de las mayores protestas antigubernamentales de los últimos meses, pese a que este ofreció hace apenas cuatro días su renuncia al cargo tras ser obligado a abandonar su residencia por miles de manifestantes.
Los cuerpos de seguridad emplearon gases lacrimógenos para tratar de dispersar a los cientos de manifestantes que se plantaron hoy en las afueras del despacho del primer ministro.
Las manifestaciones volvieron a estallar esta mañana después de que se conociera que el presidente Rajapaksa había abandonado el país con destino a Maldivas, el mismo día en que debe hacer efectiva su dimisión.
En ausencia del presidente, el primer ministro es el primero en la línea de sucesión de la Presidencia, sin embargo Wickremesinghe había anunciado el sábado su renuncia junto a Rajapaksa, tras la revuelta social que los obligó ese día a abandonar sus residencias.
Ni el Gobierno ni las fuerzas de seguridad habían actuado en contra de los manifestantes durante los últimos cuatro días, desde el asalto a las instalaciones oficiales, y el sucesivo anuncio de la renuncia del presidente.
Justo esta mañana se ha sabido que Rajapaksa ha designado a Wickremesinghe como presidente interino encargado de la nación. La designación de Wickremesinghe, informada por el presidente del Parlamento en una declaración a la prensa, llega el mismo día en que la nación esperaba que Rajapaksa hiciera efectiva su dimisión tal y como anunció el pasado sábado, tras huir de su residencia oficial obligado por unas protestas multitudinarias.