El primer contenedor de reciclaje se colocó en Barcelona... y otras curiosidades sobre los depósitos
Fue en 1982, en la plaza de Sant Jaume.
En estos días se cumplen veinte años desde que en España la Ley de envases y residuos de 1997 promoviera la creación de los Sistemas Integrados de Gestión (SIG), las sociedades sin ánimo de lucro encargadas de gestionar el reciclaje de los residuos de envases ligeros, de papel y cartón y también de los envases de vidrio, que iniciaron su actividad en 1998.
Dos décadas después de su puesta en marcha, los responsables de ambas entidades nos descubren cómo ha evolucionado este sistema y nos desvelan algunos datos curiosos sobre esos elementos que forman parte del mobiliario habitual de nuestras ciudades: los contenedores. A estos, además, ayuntamientos o movimientos artísticos de algunos lugares de España están dando un nuevo aspecto, más atractivo e integral.
¿EN QUÉ CIUDAD SE INSTALARON LOS PRIMEROS CONTENEDORES?
El primer contenedor verde para el reciclaje de vidrio se ubicó en Barcelona, el 10 de febrero de 1982, en concreto en la plaza Sant Jaume. Fue por tanto antes de que entrara en vigor la Ley de envases y residuos. De aquel pionero contenedor ya no quedan rastros en la actualidad. Unos días más tarde Madrid, en concreto en el barrio de Moratalaz, instalaba también el primer contenedor de vidrio.
El primer contenedor amarillo se instaló en 1997, aunque desde Ecoembes no han podido precisar el lugar concreto.
¿HAY ALGÚN LUGAR DÓNDE AÚN NO HAYA CONTENEDORES?
En 2016 había en España un total de 572.739 contenedores amarillos y azules, distribuidos por toda la geografía (14.782 más que el año anterior). De esta manera, según datos de Ecoembes, el 99% de los españoles tiene acceso a la recogida selectiva de estos residuos con una media de un contenedor cada 100 metros.
En el caso del vidrio, en 2016 había más de 211.000 verdes, lo que representa un ratio de 1 por cada 220 habitantes, según datos de Ecovidrio. Por tanto, se encuentran en cualquier lugar de España, una cifra que, según sus responsables, crece cada año para ofrecer un mejor servicio a los ciudadanos.
¿CUANTOS TIPOS DE CONTENEDORES HAY?
A lo largo de estos veinte años se han ido ampliando el tipo de contenedores y sistemas de recogida:
— De carga: Los hay de diferentes tipos, en función del lugar por el que se depositan los residuos o la forma de "cargar" el contenedor en el camión de recogida. En este sentido, los hay de carga superior, lateral, bilateral y trasera. Para la recogida de envases ligeros (amarillo), el sistema mayoritario es el de carga lateral, con un 44%, según datos de Ecoembes.
— Iglús: Se denominan así a los contenedores con forma redondeada y que recuerdan a las viviendas de los esquimales. Se utilizan tanto en el reciclado del vidrio como para el resto de residuos de envases ligeros y papel y cartón. De hecho, según datos de Ecoembes, el 55% de los utilizados para la recogida de papel y cartón son de tipo iglú.
Desde Ecovidrio añaden que han adaptado sus contenedores a las diferentes necesidades, de manera que hay iglús con boca industrial y otros con sistema de volcado automático para la hostelería. Y también los han utilizado como herramienta de concienciación para llamar la atención a los ciudadanos sobre la importancia de reciclar: se han creado iglús con diseños de Agatha Ruiz de la Prada, con forma de pelota de tenis —utilizados en el Mutua Madrid Open—, contenedores solidarios con motivo del día mundial del cáncer de mama, o un 'miniglú' para los hogares con diversos diseños.
— Soterrados: Se encuentran bajo tierra, dejando solo en la superficie la boca para depositar el residuo. Suponen el 5% del sistema de recogida tanto para los residuos de papel y cartón como para los envases ligeros.
— Bolseo: Este sistema es el que hay por ejemplo en zonas históricas de difícil acceso, como el centro de Toledo, donde la gente deja la bolsa en la calle y se carga a mano en el camión. Supone el 1% del sistema de recogida para los residuos de papel y cartón y el 2% para los envases ligeros.
— Recogida neumática: Parecidos a los soterrados, solo que se les hace circular a los residuos por una gran tubería subterránea hasta el punto de recogida. Supone el 1% del sistema para los residuos de envases ligeros.
Y aunque ya han evolucionado, el futuro de los contenedores pasará por la aplicación de las nuevas tecnologías para la mejora de las gestión de esos residuos: identificando, pesando y clasificando... También se espera que, en ese futuro, estos inteligentes también sean 100% reciclables.