El PP y Cs no cierran todavía el acuerdo en Andalucía por los aforamientos y Vox
Los de Rivera quieren que el PSOE se abstenga para pactar la Mesa.
El PP y Cs han acordado este lunes seguir negociando un acuerdo programático que permita la gobernabilidad de Andalucía dado que aún no han logrado llegar a puntos de encuentro principalmente en lo que a regeneración democrática respecta.
Además, otro punto de desencuentro ha sido la composición de la Mesa del Parlamento, una negociación que se han emplazado a cerrar hasta el 26 de diciembre, un día antes de que se constituya la XI Legislatura. Los populares esperan contar con los votos de Vox, mientras que los de Rivera apuestan por llevar al PSOE a la abstención.
Al término de la segunda reunión que han mantenido las comisiones políticas del PP y Cs que pilotan las negociaciones para cerrar un acuerdo de gobierno en Andalucía, que se ha prolongado por un par de horas en el Parlamento, han comparecido ante los medios los líderes andaluces de sendas fuerzas, Juanma Moreno y Juan Marín, respectivamente, quienes se han mostrado convencidos de que el acuerdo finalmente será posible y que "en un par de días" podrán superar los escollos que han encontrado en el plano programático.
Los apoyos que necesitan para cerrar la composición de la Mesa es unos de los principales obstáculos que han encontrado en la negociación pues mientras que Cs quiere que el PSOE-A que se abstenga, el PP-A cree que los andaluces votaron el 2D que los socialistas "no sean protagonistas de los cambios" y que, además, "van a poner palos en rueda", si bien respeta la "visión y estrategia" que quieran mantener los de Marín en este sentido.
"Cuando quieres hacer un cambio no es posible que participe a quien quieres cambiar", ha recalcado Moreno al respecto, quien preguntado por su fórmula para el reparto de la Mesa ha explicado que ésta pasa por que Cs y PP cierren un acuerdo y el resto de fuerzas "se posicionen".
Además, ha garantizado que no está negociando con Vox de manera paralela, aunque sí están manteniendo conversaciones y escuchando a todas las fuerzas que llaman a su puerta.
Por su parte, Marín ha defendido la necesidad de que para la negociación de la Mesa se pongan de acuerdo los tres partidos constitucionalistas representados en el arco parlamentario andaluz, a su juicio, PSOE-A, PP-A y Cs, de modo que intentará que los socialistas respondan a esta propuesta. Ha dicho que explorarán esta opción en los próximos días, si bien no negociará con el partido de Susana Díaz hasta que cierren un acuerdo con los 'populares'.
Marín ha avanzado que llamará al portavoz parlamentario del PSOE-A, Mario Jiménez, una vez que haya cerrado el acuerdo programático con el PP, a la par que ha insistido en que los socialistas "tienen que tener visión de Estado y asumir su derrota en las autonómicas con el peor resultado de su historia".
Los aforamientos
Las discrepancias en el plano programático, según el dirigente de Cs, se sitúan en asuntos como la eliminación de los aforamientos, la reforma de la ley electoral o la limitación de mandatos.
Además, Marín ha explicado que su intención es que se plantee un calendario que concrete las actuaciones a poner en marcha en los primeros cien días de gobierno para que los andaluces vean que los cambios se empiezan a producir, lo que supondría una diferencia "sustancial" respecto a los acuerdos que hasta ahora ha cerrado Cs con el PSOE-A.
El PP mete prisa
Por otra parte, el líder del PP-A, que ha vinculado el acuerdo de la Mesa a la conformación del Gobierno andaluz, ha advertido de que sería un fracaso "descomunal" que se llegara al 27 de diciembre sin un acuerdo en ambas cuestiones, lo que llevaría a que Cs tuviera que dar explicaciones a sus electores.
"No nos podemos permitir el lujo de frustrar las expectativas e ilusiones de cientos de miles de andaluces", ha afirmado Moreno antes de mostrarse convencido de que finalmente habrá acuerdo, añadiendo que "diez días en políticas son una eternidad".
Junto a ello, el candidato 'popular' ha defendido que las negociaciones deberían ser más rápidas porque "en Andalucía hay ansias de cambio" y son muchos los sectores que le advierten de que "este tiempo muerto afecta a Andalucía". En su opinión, "hay que ser más diligentes para negociar porque pasan los días y no se está concretando".