El PP asegura que las ayudas llegan "tarde" y copian a las suyas, pero no dice si votarán a favor
La secretaria general de los populares, Cuca Gamarra, indica que esperarán a conocer la letra pequeña antes de anunciar el sentido de su voto.
El PP ha denunciado que las medidas del último paquete de ayudas frente a la inflación se quedan “cortas” y lleguen “tarde”, porque por ejemplo se “copia” tres meses después la propuesta de Alberto Núñez Feijóo de reducir el IVA de los alimentos básicos, una demora que ha costado a los españoles 300 millones de euros.
Así lo ha advertido la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, que este martes ha comparecido en rueda de prensa tras anunciar el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, las últimas ayudas a la ciudadanía y ofrecer un balance político del último año.
El PP, que no ha anunciado su voto a este nuevo real decreto a la espera de conocer la letra pequeña, ha criticado que la rebaja del IVA no llegue a productos como la carne, el pescado, las conservas o el agua, que también se han encarecido y son productos básicos o la eliminación de la ayuda de 20 céntimos a los carburantes, que se reduce a los sectores más afectados.
El PP acusa al Ejecutivo de improvisar en el ”último minuto” para que “parezca que hace algo” y de hacer caja con la inflación por el incremento en 33.000 millones de euros de la recaudación cuando la cesta de la compra ha subido un 15 % de precio. Lamenta además que el Ejecutivo no haya recogido el guante de su propuesta de deflactar el IRPF o las ayudas fiscales al pago de las hipotecas.
“Copia tarde las medidas de Feijoo y sale muy caro a los españoles”, ha subrayado Gamarra, que cree que las anunciadas “no son buenas medidas porque no van a llegar a compensar esa subida del 15% de la cesta de la compra” y porque “no están pensando a los españoles que no podrán acceder a los 200 euros directos” por cobrar más de 27.000 euros.
El PP ha reprochado además una “nefasta gestión” de los fondos europeos y ha censurado el “triunfalismo” del Gobierno cuando España es junto a República Checa la única economía en no recuperar los niveles previos a la pandemia.