El PP aprueba un nuevo Código Ético que prohíbe a sus miembros recibir regalos ni "trato de favor"
Aspira a ser "un referente en el ámbito político español".
El PP ha aprobado este martes un nuevo Código Ético y de Conducta para sus miembros. El nuevo reglamento endurece las normas de comportamiento interno de modo que, entre otras cuestiones, no se podrá aceptar ningún trato de favor, privilegio o ventaja ni se permitirán regalos.
El nuevo Código, al que ha tenido acceso Europa Press y que ha entrado en vigor este mismo martes, será de obligado cumplimiento para todos los empleados y cargos del PP en todo el ámbito nacional.
Los integrantes del PP no deberán aceptar "ningún trato de favor o situación que implique privilegio o ventaja", ni podrán aceptar o solicitar "regalos, atenciones o liberalidades de cualquier tipo que, por su importe o causa, no correspondan a los usos y costumbres sociales y de cortesía o que puedan comprometer (o parecer que lo hacen) a quien los da y/o a quien los recibe".
Entre la lista de regalos prohibidos, cita expresamente las entregas de dinero en metálico y las invitaciones a comidas, cenas o eventos deportivos de elevado valor económico o los viajes y estancias en hoteles de lujo.
Tras la sentencia de los primeros años de actividades de la trama Gürtel, que condenaba por corrupción al PP en tanto que partícipe a título lucrativo, la formación ha dado luz verde a un código de conducta con el que aspira a ser "un referente en el ámbito político español".
Esta normativa busca "ir más allá de las previsiones que la propia ley establece". Las normas están encaminadas, no solo a prevenir prácticas corruptas, "sino también a ser más proactivos en la detección, identificación y prevención de situaciones contrarias a la ley o que puedan parecer inapropiadas a un espectador objetivo, tal y como está demandando en estos momentos la sociedad española".
Unas cuentas sometidas a auditorías externas
El Código también llama a todos los miembros a colaborar con las autoridades públicas en el marco de sus competencias y a abstenerse de promover o realizar conductas que promuevan el odio, la hostilidad, la discriminación o violencia o el enaltecimiento de conductas delictivas.
El PP se compromete a llevar unas cuentas transparentes sometidas a auditorías internas y externas con la elaboración de un informe de control interno y la publicación del informe anual realizado por el Tribunal de Cuentas.
La transparencia también deberá primar en la contratación con terceros, que deberá guiarse por "criterios objetivos directamente vinculados al objeto del contrato", y se prohibirá en el caso de personas o empresa "que conocidamente ostenten la condición de funcionario público o que tengan algún vínculo personal, familiar y/o de relación comercial con algún integrante del partido".
Los miembros del PP deberán asegurar que el partido "cumpla con todas sus obligaciones en materia fiscal, evitando, en cualquier caso, la elusión ilícita del pago de tributos" y garantizando "el cumplimiento de las obligaciones derivadas de los sistemas públicos de protección y de seguridad social".