El pis con olor a espárragos es real, pero no todos pueden percibirlo
La evolución ha hecho que algunas personas sean capaces de notarlo y otras no.
El pis siempre huele a espárragos tras digerirlos. Te puedes empeñar en negarlo, pero estos tallos verdes contienen ácido aspártico, que es el responsable de darle a la orina ese olor particular después de comerlos.
Cuando el organismo digiere los alimentos, descompone los compuestos orgánicos a través de un proceso enzimático. En el caso de los espárragos, sus compuestos orgánicos volátiles se liberan en la orina en forma de vapor, y ese es el olor que percibes cuando sale de tu cuerpo, según explica a la edición estadounidense del HuffPost el doctor Anish Sheth, gastroenterólogo del Princeton Medical Group y autor de What's Your Baby's Poo Telling You?
Si sigues insistiendo en que nunca has notado ningún olor a espárragos en el pis, es porque no tienes la capacidad para detectarlo. El olor está ahí, solo que eres incapaz de captarlo.
"El proceso digestivo es bastante similar entre personas, pero la capacidad de detectar los olores varía", señala el doctor Sheth. El motivo es que la percepción del olor, al igual que sucede con la percepción de los colores, es algo completamente personal.
"Cada persona tiene su propia percepción de los olores del mundo. La experiencia de cada uno con los olores es completamente única", asegura el doctor Ian Davison, profesor de Biología en la Universidad de Boston. La incapacidad de percibir este olor a espárragos en la orina es un ejemplo más de anosmia específica, un fenómeno por el cual un olor concreto no puede ser detectado por una persona concreta.
Existen en torno a 400 genes diferentes que condicionan los receptores olfativos de cada persona. Algunos tienen una mutación en uno de esos genes que afecta a la capacidad de percibir la sustancia química que le da ese olor particular a la orina. Esta carencia parece algo arbitraria, pero el doctor Sheth la achaca a una "curiosa singularidad de la evolución humana". Hasta un 50% de la gente es capaz de detectar ese olor. El doctor Davidson especula que la mutación se ha ido produciendo con el paso del tiempo. Para muchos animales, el olfato es un sentido clave para su supervivencia. Los humanos, en cambio, se apoyan tanto en el sentido de la vista que el olfato ha acabado involucionando. Estas carencias aleatorias, como no ser capaces de detectar el olor a espárragos en la orina, han comenzado a extenderse.
El olor de espárragos al hacer pis no es el único aroma afectado por las anosmias específicas. Dos de cada tres personas tienen que esforzarse para captar el olor de la vainillina, el principal compuesto orgánico de la vainilla. Otras personas son especialmente sensibles (o insensibles) a la androstenona, una sustancia presente en el sudor. "Puede resultar desde suave y agradable hasta intenso y desagradable", comenta el doctor Davidson.
No hay mucho que se pueda hacer al respecto, pero si el olor de los espárragos te repugna, el doctor Sheth aconseja cortarles la punta del tallo, ya que "ahí se concentra la mayor parte de sus compuestos". Aunque también es cierto que esa es la parte más sabrosa.
Este artículo fue publicado originalmente en la edición estadounidense del 'HuffPost' y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.