El Parlamento Europeo da luz verde a la ley para garantizar salarios mínimos "dignos" en la UE
El texto no incluye una cantidad concreta, pero sí da indicaciones a los estados miembro.
El Parlamento Europeo ha dado el visto bueno al acuerdo que establece un marco común dentro de la UE para asegurar salarios mínimos “dignos”. El texto, que no fija una cantidad económica concreta, sí busca mejorar la cohesión social entre los Veintisiete, un bloque en el que solo seis estados no cuentan con la figura del salario mínimo interprofesional.
Las reglas aprobadas este miércoles en Estrasburgo por amplísima mayoría absoluta (505 votos a favor, 92 en contra y 44 abstenciones) otorgan a cada miembro las competencias para evaluar si esos salarios garantizan un nivel de vida adecuado, en función de variantes como las condiciones socioeconómicas, el poder adquisitivo o la evolución de los niveles de productividad a nivel nacional.
La nueva norma se aplicará a todos los empleados de la Unión Europea que tengan un contrato de trabajo o una relación laboral. En el caso de los países de la UE en los que el salario mínimo ya está protegido exclusivamente a través de convenios colectivos no estarán obligados a introducir estas normas ni a aplicar dichos convenios de manera universal.
Qué incluye el texto
Este sistema deberá incluir medidas de supervisión fiables, controles e inspecciones sobre el terreno, de acuerdo a la nueva normativa. Los Estados miembros, igualmente, estarán obligados a fijar un sistema para asegurar el cumplimiento de la directiva y abordar fenómenos como la subcontratación abusiva, los falsos autónomos, las horas extra no declaradas o el aumento de la intensidad del trabajo.
Además, los países sí tendrán que fortalecer las negociaciones sectoriales e intersectoriales para proteger a los trabajadores asegurando un salario mínimo y, en aquellos países de la UE en donde menos del 80% de la plantilla esté amparada por un convenio colectivo, tendrán que crear y hacer público un plan de acción que aumente esta cobertura, implique a agentes sociales e informe a la Comisión Europea de las medidas adoptadas.
En todo caso, la fijación del salario mínimo seguirá siendo una competencia de los Estados miembro, que tendrán que asegurarse de que permita a los trabajadores llevar una vida digna, teniendo en cuenta el coste de la vida y el nivel salarial general.
A la hora de evaluar si sus salarios mínimos legales vigentes son adecuados, las autoridades podrán tomar como referencia una cesta de bienes y servicios a precios reales, o bien el 60 % de la mediana salarial bruta y el 50 % del salario medio bruto.
Negociación colectiva como base
La Eurocámara subrayó que la negociación colectiva sectorial e intersectorial es un factor “esencial” para lograr unos salarios mínimos “adecuados”, por lo que la nueva ley europea aspira a promoverla y reforzarla. Así, los países con una tasa de cobertura de la negociación colectiva inferior al 80 % deberán establecer, con la participación de los interlocutores sociales, un plan de acción para promoverla.
“Este sistema deberá incluir medidas de supervisión fiables, controles e inspecciones sobre el terreno”, resaltó la Eurocámara. Los trabajadores, sus representantes y los afiliados a los sindicatos tendrán derecho a compensación en caso de incumplimiento de la normativa.
Dentro de la UE, 21 de los 27 estados cuentan ya con un salario mínimo, entre ellos España. En los seis restantes (Italia, Dinamarca, Finlandia, Suecia, Austria y Chipre) los niveles salariales se determinan a través de la negociación salarial colectiva.
El texto debe ser ahora aprobado formalmente por el Consejo de la UE, que reúne a los países, y publicado en el “Diario Oficial” de la UE. A partir de entonces, los Estados miembros dispondrán de dos años para dar cumplimiento a la directiva.