El nuevo responsable de Justicia del PSOE propone denunciar el Concordato con la Santa Sede
"Hay que empezar a poner las cosas en su sitio", dice Andrés Perelló.
El nuevo secretario de Justicia, Libertades y Nuevos Derechos del PSOE, Andrés Perelló, ha anunciado este miércoles su intención de plantear a la Ejecutiva del partido la denuncia del Concordato con la Santa Sede por considerarlo "obsoleto". El texto original data de 1953 y fue rubricado por el régimen franquista.
Perelló, en una entrevista en TVE, ha matizado que se trata de un planteamiento personal que aún no ha sometido a la dirección del partido, pero ha recalcado la necesidad de "poner las cosas en su sitio" con la Iglesia Católica. Es decir, más que poner a la Iglesia en su sitio, se trata de que el Estado se ponga en el suyo, ha observado el dirigente socialista antes de recordar el carácter "aconfesional" que determina la Constitución. "Hay que dejar a la Iglesia tranquila", ha sentenciado.
Perelló ha añadido que no puede "estar más de acuerdo" con la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) que considera que las exenciones fiscales de la Iglesia Católica en España podrían constituir "ayudas estatales prohibidas".
A su juicio, se trata de acabar con situaciones en las que la Iglesia registre bienes a su nombre que no tengan que ver con el culto y en ocasiones con fines productivos, y no pague IBI.
AVISOS QUE NUNCA CUAJAN
Tras las elecciones del 20 de noviembre de 2015, el pacto inicial que el PSOE ya cerró con Ciudadanos apostaba por una Ley Orgánica de Libertad Religiosa y de Conciencia que revisara los acuerdos con la Santa Sede "para buscar un nuevo marco de relación entre el Estado y la Iglesia católica". Podemos siempre ha querido anular el acuerdo -importante en el caso de que los socialistas busquen una mayoría que desatasque el tema-, mientras el PP ni la cita en sus programas electorales, de tan intocable.
Los socialistas, en realidad, han anunciado en al menos cinco ocasiones que revisarán los acuerdos por conferir un trato privilegiado a la Iglesia. Sin embargo, sus advertencias no han cuajado en una iniciativa parlamentaria que pida la anulación final de los tratados.
En 2014, aún como aspirante a la secretaría general del PSOE, Pedro Sánchez señaló que se deben revisar "a fondo" todos los "privilegios fiscales" que tiene la Iglesia, que no puede ser fedatario público, por lo que, en consecuencia, "debemos aprobar una ley de libertad religiosa que reconozca el hecho religioso de las personas en su ámbito privado". "El Estado por el que voy a trabajar es laico", sentenció. En 2012, el asunto llegó a la ponencia marco del congreso socialista, con Alfredo Pérez Rubalcaba al frente.