Los reyes tenían este jueves en Cáceres una cita marcada a fuego en su calendario. Felipe y Letizia han viajado hasta la ciudad extremeña para la inauguración del Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear, que alberga las obras de la colección de la reputada galerista alemana.
En el museo, donde los reyes han estado acompañados por el Ministro de Cultura, Letizia ha vivido un momento, cuando menos, incómodo. En una de las imágenes distribuidas por la agencia GTRES se aprecia a la reina en uno de los balcones junto a de Alvear.
La reina Letizia junto a Helga de Alvear.GTRES
La galerista aparece con la mascarilla por debajo de la nariz y agarrando fuertemente del brazo a la reina, algo poco recomendable en tiempos de coronavirus, ya que la distancia de seguridad era inexistente y la mascarilla no estaba bien ajustada. De Alvear se agarró al brazo de Letizia debido a sus problemas de movilidad y se disculpó ante ella cuando se dio cuenta de que se estaba saltando la recomendación sanitaria.
Para la ocasión, la reina ha rescatado de su armario un vestido de tweed blanco de Felipe Varela que ha combinado con unos salones negros de piel de serpiente de Manolo Blahnik y un bolso negro de Nina Ricci de más de 1.000 euros.
El museo de Helga de Alvear coloca a Cáceres como una referencia en el mundo del arte contemporáneo ya que en la colección se incluyen obras de Pablo Picasso, Louise Bourgeois y Ai Weiwei.