La Seguridad Social advierte: beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital podrían perder la ayuda
Uno de cada cuatro potenciales beneficiarios desconoce esta ayuda que, a partir del próximo año, será compatible con un trabajo.
Desde su puesta en marcha en junio de 2020, el Ingreso Mínimo Vital ha llegado a unos 510.000 hogares españoles y casi 1,5 millones de personas, 600.000 de ellas menores.
Esta prestación de la Seguridad Social pretende sacar de la pobreza extrema y muy alta a 1,6 millones de hogares en España con un ayuda económica que complementa los ingresos hasta que alcancen un umbral mínimo. Cuando el Gobierno lanzó la prestación, el departamento que dirige Escrivá estimaba que llegaría a 850.000 hogares, pero en estos más de dos años de despliegue aún no se ha alcanzado esta cifra.
Uno de cada cuatro potenciales beneficiarios desconoce esta ayuda que, a partir de 2023 los que sí la reciban verán aumentada la cuantía de la prestación si encuentran un empleo o mejoran sus ingresos laborales, una medida con la que el Gobierno pretende que a los beneficiarios de esta ayuda les compense trabajar siempre.
Sin embargo, otro muchos beneficiarios podrían perder su prestación después de que la Seguridad Social haya anunciado que a final de este año empezará a revisar las rentas de 2022 de aquellos que perciben el Ingreso Mínimo Vital. Esto supondría que algunos pierdan el derecho a recibir la ayuda.
Al final de cada año, la Seguridad Social comprueba todas las rentas obtenidas durante 2022. Con el total se actualiza las cuantías del ingreso mínimo vital y, además, se le suma el incremento en el Ingreso Mínimo Vital del 8,5% aprobados en los Presupuestos Generales del Estado de 2023. Según la unidad familiar, las cuantías podrán ir desde los 6.000 a los 14.000 euros anuales.
En este sentido, la administración apunta que pueden darse hasta tres casos: que los beneficiarios cobren más, que reduzca su cuantía o que sigan cobrando durante 2023 la cuantía recibida hasta ahora.