El ‘impeachment’ arranca fuerte: "el mayor interés de Trump en Ucrania era investigar a Biden", dice un diplomático
Bill Taylor denuncia la obsesión del republicano por el demócrata y los canales de comunicación con Kiev "altamente irregulares" y que interferían en su trabajo
Tras semanas de burocracia y movimientos a puerta cerrada, el proceso de impeachment contra Donald Trump, el presidente de EEUU, ha entrado este miércoles en su fase pública, abierta a todos hasta por televisión, con las primeras declaraciones de testigos retransmitidas en directo desde el Congreso.
Y, para empezar, se ha escuchado un testimonio demoledor de alguien que estaba más que cerca de todo el proceso que ahora se revisa, el diplomático Bill Taylor, el funcionario estadounidense de mayor rango en Ucrania.
Según ha informado a los congresistas, el mayor interés que el presidente republicano tenía en Ucrania eran “las investigaciones” al exvicepresidente Joe Biden, segundo de Barack Obama y, ahora, en la pelea por ser el candidato del Partido Demócrata a la Casa Blanca en 2020. O sea, competencia directa de Trump en la pugna por el poder.
El diplomático desveló la existencia de una llamada telefónica que se produjo en julio en un restaurante entre Trump y el embajador estadounidense ante la Unión Europea (UE), Gordon Sondland, otro de los protagonistas de la polémica y que fue escuchada por encima por uno de los miembros del equipo de Taylor.
Después de la llamada, el ayudante de Taylor preguntó a Sondland sobre la opinión del presidente sobre Ucrania y este supuestamente “respondió que al presidente Trump lo que más le importaban eran las investigaciones sobre Biden”, de acuerdo con lo que declaró hoy el diplomático.
Ucrania ha estrechado su relación con EEUU desde 2014, cuando Moscú se anexionó la península de Crimea; y, de hecho, desde 2014 el Congreso estadounidense ha autorizado 1.600 millones de dólares en asistencia militar a Ucrania.
Un canal “altamente irregular”
Según lo indicado por Taylor, el abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, era el líder de un canal “altamente irregular” de comunicación con Ucrania y que estaba socavando los objetivos oficiales de la diplomacia estadounidense en el país europeo, al que Washington había pedido reformas energéticas y lucha contra la corrupción.
La llamada telefónica entre Trump y Sondland se produjo supuestamente el 26 de julio, un día después de la polémica conversación telefónica en la que el mandatario estadounidense pidió a su homólogo ucraniano, Vladímir Zelenski, que le hiciera un “favor”.
Taylor ha asegurado que el presidente estadounidense condicionó dos cosas -la entrega a Ucrania de 400 millones de dólares en ayuda militar y la programación de una reunión en la Casa Blanca entre Trump y Zelenski- a un compromiso de Kiev de investigar a Biden y los demócratas.
Estamos ante las primeras audiencias sobre un juicio político a un presidente de EEUU en dos décadas, desde que Bill Clinton (1993-2001) tuviera que responder sobre su relación con la becaria de la Casa Blanca Monica Lewinsky, un proceso del que salió absuelto.