El gran informe del cambio climático advierte de que ya se han causado cambios “irreversibles" para los próximos "siglos o milenios"
Atribuye el avance de la crisis climática a la actividad humana y urge actuar cuanto antes para frenar la situación.
Muchos de los efectos producidos por el calentamiento global son ya “irreversibles para los próximos siglos o milenios”. Son las conclusiones del último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos para el Cambio Climático (IPCC), que responsabiliza a la humanidad de su “roll innegable” en la crisis climática y de la consecuente —y cada vez más habitual— aparición de fenómenos extremos.
El estudio pronostica un aumento de la temperatura global y del nivel del mar alarmante en los próximos años. “Si se mantiene el actual ritmo de emisiones de gases de efecto invernadero”, sostienen, “la temperatura global aumentará 2,7 grados a finales de siglo con respecto a la media de la era preindustrial”. En concreto, los científicos prevén que se alcanzará una subida de 1,5 grados en 2040, de 2 grados en 2060 y de 2,7 en 2100. Temperaturas que quedarían lejos del objetivo de mantenerse por debajo de 2 grados que fija el Acuerdo de París—y que recomienda limitar a 1,5—.
Subida de hasta 2,7 grados para final de siglo
En el escenario más pesimista, donde las emisiones de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero se doblarían a mediados de siglo, esto podría derivar en niveles catastróficos con subidas de alrededor de 4 grados en 2100, alerta el informe.
La situación, irremediablemente conllevará mayores eventos climáticos extremos. “Cada grado de aumento podría suponer un 7% más de precipitaciones en el mundo, es decir, más tormentas, inundaciones y otros desastres naturales”, advierten.
Asimismo, las olas de calor extremo, que en época preindustrial ocurrían aproximadamente una vez por década y actualmente ocurren 2,3 veces, podrían multiplicarse hasta 9,4.
Los actuales cambios en el clima “no tienen precedentes”, destacan. Según los expertos del panel, la actual concentración en la atmósfera de dióxido de carbono supera las 410 partículas por millón, la mayor tasa de los últimos dos millones de años.
Más fenómenos extremos
De igual modo, el nivel del mar ha crecido de media unos 20 centímetros entre 1901 y 2018, pero si anualmente se ha elevado unos 1,3 milímetros durante las siete primeras décadas del pasado siglo, ahora lo hace unos 3,7 milímetros, registrando el océano durante el último siglo su mayor calentamiento en 3.000 años.
El área de hielo en el Ártico también registró en la última década su nivel más bajo desde 1850, subraya el documento, que vaticina que antes de 2050 ese océano puede quedar prácticamente sin hielo marino en al menos uno de sus veranos boreales.
La investigación refleja además cómo varias regiones de África, América del Sur y Europa experimentarán un aumento de la frecuencia y/o la gravedad de las sequías agrícolas y ecológicas, al tiempo que las precipitaciones medias aumentarán en todas las regiones polares, del norte de Europa y de América del Norte, en la mayoría de las regiones asiáticas y en dos regiones de América del Sur.
España, “punto rojo”
España ya es considerada como uno de los puntos “rojos” del cambio climático, recuerda Francisco J. Doblas-Reyes, investigador del Barcelona Supercomputing Center (BSC-CNS) y uno de los científicos que ha participado en el último informe del IPCC.
Desde Greenpeace esperan que las desoladoras conclusiones del estudio sirvan para “calentar motores” de cara a la conferencia climática COP26, que tendrá lugar entre el 31 de octubre y el 12 de noviembre en Escocia, y donde los distintos Estados presentarán sus planes climáticos para 2030, nuevos o revisados, en línea con el límite de 1,5°C.
“Esperemos que así sea: que presenten los objetivos revisados y planes climáticos con más ambición de la que han tenido hasta ahora. Solo así tendremos una única oportunidad para cambiar los datos que ofrecerá el séptimo informe: el principio de la salvación o la constatación de la llegada de impactos tan profundos que serán absolutamente irreversibles”, señalan desde la ONG.
SEO/BirdLife resalta por su parte “la necesidad de impulsar con mayor rapidez y profundidad las transformaciones necesarias para frenar el avance del cambio climático y reducir la vulnerabilidad de la humanidad y la biodiversidad a sus impactos, sobre todo de las comunidades más expuestas”.