El Gobierno suspende las reglas fiscales: CCAA y Ayuntamientos podrán aumentar el gasto
Los Consistorios podrán usar sus remanentes para hacer frente a la crisis.
El Gobierno ha anunciado este miércoles la suspensión de las reglas fiscales durante los años 2020 y 2021 para hacer frente a la crisis económica derivada del coronavirus, en consonancia con lo decidido en la Unión Europea.
Así lo ha anunciado la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, en una rueda de prensa en el Congreso. “Quedan sin efectos los objetivos de estabilidad y de deuda pública de 2020 y 2021 y tampoco se aplicará la regla de gasto para esos ejercicios”, han señalado desde el Ministerio de Hacienda.
Los Ayuntamientos podrán usar el superávit
Esta medida beneficiará a todas las administraciones públicas, que podrán incrementar el gasto público con el objetivo de alentar a la recuperación. La economía española sufrió un batacazo en el segundo trimestre, al hundirse un 17,8% el producto interior bruto (PIB) entre abril y junio.
Gracias a esta suspensión, los Ayuntamientos podrán usar los remanentes de tesorería, unos 14.000 millones de euros, para luchar contra los efectos de la pandemia del coronavirus. “La suspensión de las reglas fiscales va a permitir que los Ayuntamientos puedan usar sus remanentes”, ha asegurado Montero.
Se resuelve así una larga batalla que libraron los alcaldes contra el Ministerio de Hacienda para poder gastar estos ahorros, que están depositados en los bancos. El Gobierno sufrió un duro revés el pasado 10 de septiembre cuando el Congreso tumbó el decreto sobre los remanentes.
Los Ayuntamientos también reclamaban poder utilizar el superávit, el dinero que ingresan cada año por encima de los gastos. Hasta ahora, ese dinero solo podía dedicarse a pagar la deuda pendiente, debido a ley aprobada en 2012, por Cristóbal Montoro. Esto ya no será así.
“Se suspende la exigencia de que las comunidades autónomas y las entidades locales destinen su superávit a amortizar deuda y los objetivos de estabilidad ya no actuarán como límite a las inversiones financieramente sostenibles”, han apuntado desde Hacienda.
En línea con la Unión Europea
La decisión del Gobierno va en la misma línea de las acciones adoptadas a nivel europeo. La Comisión Europea y el Consejo Europeo aprobaron en marzo activar la cláusula general de salvaguarda. Posteriormente, se decidió que la cláusula de salvaguarda se mantendrá activa en 2021.
“La Comisión Europea ha confirmado que la cláusula de salvaguarda se mantiene en 2021 y nos ha confirmado que para el año 2021 sigue en suspenso”, ha asegurado Montero.
El llamado Pacto de Estabilidad y Crecimiento limita el déficit público —la diferencia entre ingresos y gastos— al 3% y la deuda pública al 60% del producto interior bruto (PIB). El déficit de España se situó en el 2,82% al finalizar 2019, mientras que la deuda pública ha alcanzado el 110,1% del PIB en el segundo trimestre de 2021.
Hacienda argumenta que Ley de Estabilidad Presupuestaria contempla que las cuentas públicas deben aprobarse de acuerdo a la normativa europea. “La elaboración, aprobación y ejecución de los presupuestos y demás actuaciones que afecten a los gastos o ingresos de los distintos sujetos comprendidos en el ámbito de aplicación de esta Ley se realizará en un marco de estabilidad presupuestaria, coherente con la normativa europea”, señala el artículo 3 de esta ley.
La activación de la cláusula de salvaguarda permite a los países de la UE dejar en suspenso la senda de consolidación que había establecida antes de la irrupción de la pandemia. Es decir, no se incumple la normativa europea. Los Gobiernos europeos presentarán sus presupuestos antes del 15 de octubre sin tener en cuenta estos límites.
No habrá que aprobar una senda de déficit
La suspensión de las reglas fiscales tiene otra ventaja añadida para el Gobierno de coalición, ya que no tendrá que llevar al Congreso una nueva senda de estabilidad. Este es normalmente el primer paso en la aprobación de los presupuestos. La tramitación podía complicarse al no contar con mayoría absoluta.
“El Gobierno aprobará la suspensión de la senda de estabilidad vigente y dará el visto bueno al techo de gasto no financiero del Estado de 2021 que se aprobará en los próximos Consejos de Ministros”, han asegurado desde Hacienda.
Esto implica que quedan suspendidos los objetivos de estabilidad presupuestaria y de deuda pública para 2020, así como los fijados para el período 2021-2023 aprobados por las Cortes Generales en marzo y que habían quedado desfasados en la situación actual. A pesar de ello, existirán unos niveles de déficit de referencia que servirán para permitir el funcionamiento presupuestario ordinario de ambos ejercicios.