El Gobierno se plantea por primera vez acercar a los presos de ETA a cárceles próximas al País Vasco

Es un movimiento insólito: el Partido Popular (PP) y el Partido Nacionalista Vasco (PNV) están aproximando posiciones para acercar presos de la banda terrorista ETA a cárceles próximas del País Vasco. Lo ha adelantado este lunes la Cadena SER. La condición previa esencial para que se lleve a cabo esta concesión es que los reclusos deben aceptar primero la ley penitenciaria vigente, algo que podrían comenzar a acatar a partir de este mismo verano.

La SER cita "fuentes de ambas formaciones políticas" para confirmar estos contactos, que son independientes de los que debaten los presupuestos generales, añaden. En este caso, todo se mueve después de que ETA decidiera desarmarse el pasado abril y ante el "posible cambio de rumbo" de los internos de la banda de aceptar los beneficios penitenciarios que contempla la ley actual, a los que muchos aún se resistían, una postura cada vez con menos sentido entregadas las armas.

Según lo adelantado por la periodista Ana Terradillos, lo que se está estudiando es que los etarras presos estarán en cárceles que no disten más de 250 kilómetros del País Vasco. Tomando en cuenta esa horquilla, se ha trazado un mapa con diez prisiones, entre las que están dos de Zaragoza (Duera y Zuera), más las de Burgos, Soria, Teruel, León y Asturias. "Todas están acondicionadas para comenzar a trabajar con programas iniciales de reinserción que recoge la ley española penitenciaria vigente", sostiene la información.

Las negociaciones sobre el acercamiento de presos se están llevando a cabo "al más alto nivel", pero no hay nada cerrado por ahora ni un calendario de aplicación previsto, aunque parece ser que la intención de ambas partes es cerrarlo todo aproximadamente en un año, en varias fases, que vaciarán de terroristas de ETA, por ejemplo, las prisiones andaluzas o madrileñas. Esta dispersión de décadas "se diseñó en los años más duros de ETA y que no está incluida en la ley española penitenciaria vigente", recuerda la SER.

MEDIDAS COMPLEMENTARIAS

El acercamiento entre PP y PNV incluye además el traslado de una veintena de presos enfermos que tiene cuantificados la llamada izquierda abertzale, que podrían ser movidos más rápido y más cerca de Euskadi. Y en una "tercera fase" los 254 presos que tiene ETA en diferentes prisiones españolas acabarían en la cárcel de Zaballa (Álava) y en la de Pamplona, que requeriría del traspaso de competencias en prisiones al Gobierno vasco, una vieja negociación entre Vitoria y Madrid que podría seguir el modelo catalán.

Los últimos datos que ha ofrecido el Ministerio del Interior en el Senado aseguran que las cinco cárceles que tienen el País Vasco y Navarra tienen capacidad para 2739 presos. A día de hoy la ocupación llega a los 1562 internos.

DEBATE INTERNO

Los internos de la organización, abunda la SER, están a punto de concluir en los próximos meses el debate que iniciaron hace siete meses sobre los pasos que tienen que seguir en política penitenciaria. Según fuentes nacionalistas y del entorno abertzale, la votación se está haciendo de forma inédita, preso por preso y no de forma asamblearia como hasta ahora, y va a finalizar con un respaldo mayoritario a la propuesta que ha puesto sobre la mesa Bildu y Sortu, se calcula que de aproximadamente el 75%.

Los presos deberán dejar de seguir las instrucciones del autodenominado Colectivo de Presos Políticos Vascos (EPPK) y aceptar, de forma individual, los beneficios que recoge la ley, asumiendo la norma, hasta ahora no reconocida por ellos, a la que no se sometían. Es una de las condiciones que siempre ha puesto sobre la mesa el ejecutivo de Mariano Rajoy para hacer cambio con los presos que cumplen condena por pertenencia a la organización terrorista ETA.