El Gobierno defiende su "derecho y deber" de designar al exministro Campo para el TC
Bolaños ve al magistrado como un perfil "idóneo" y critica a los vocales conservadores del CGPJ por bloquear la renovación
El Gobierno ha defendido este martes su decisión de nombrar al exministro de Justicia Juan Carlos Campo y a la exalto cargo de Moncloa Laura Díez como magistrados del Tribunal Constitucional, pese a las críticas de la oposición al considerar que dicha elección ahonda en la “politización” de la Justicia.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, el ministro de la presidencia Félix Bolaños ha asegurado que el Ejecutivo está “obligado” a cumplir con la Constitución y que tiene “el derecho y el deber” de dar este paso, “ya que la situación de bloqueo que se está produciendo en el CGPJ no puede llevar a que el Gobierno no cumpla con sus deberes constitucionales”.
Bolaños ha señalado que tanto Campo como Díez “son dos juristas de reconocida competencia, indudable vocación de servicio y compromiso con la ley y la Constitución”. “Pocas personas tienen un conocimiento tan amplio de la administración desde diferentes puestos. Son perfiles idóneos. Estamos convencidos de que harán su labor con rigor y con respeto absoluto a la ley”, ha dicho sobre ambos.
Críticas a los vocales conservadores del CGPJ y a Feijóo
El Gobierno no teme, por tanto, que dichas designaciones puedan ser bloqueadas por el TC pese a que la Carta Magna establece que la renovación haya de hacerse por tercios, por lo que debería ir de la mano de otros dos magistrados elegidos por el CGPJ.
En este sentido, Bolaños ha recordado que hay una sentencia del TC en 2016 “que dicta que cuando un órgano no renueve en tiempo y forma, no puede bloquear la otra renovación”. Además, el ministro de la presidencia ha vuelto a subrayar que el Gobierno cumple con el imperativo legal y sí critica a los ocho vocales conservadores del CGPJ “que no están cumpliendo ni la ley ni la Constitución” al no postular a su candidato al TC.
De igual modo, el Gobierno no teme que el PP lleve hasta Bruselas la designación de Campo y Díez al ver “politizada” la Justicia española. En su lugar, Bolaños asegura que la Comisión Europea “está espantada con el bloqueo grosero del CGPJ” perpetrado por el PP y nada dirá sobre el cumplimiento estricto de la Constitución.
Por último, Bolaños ha criticado a Feijóo al subrayar que hubo un acuerdo con el PP para renovar el CGPJ, “pero se produjeron unas presiones que el líder de la oposición no aguantó y no se firmó lo previamente acordado”.