El Gobierno creará un impuesto de "solidaridad" que pagarán las grandes fortunas
Afectará a los 23.000 contribuyentes que en España ganan más de 3 millones de euros y será deducible con el impuesto de patrimonio de las comunidades autónomas.
Tras las idas y venidas de la mañana de este jueves, finalmente ya se conocen algunas de las medidas fiscales que el Gobierno de coalición pondrá en marcha para mantener la “cohesión” y “justicia” social, según ha declarado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, este jueves en rueda de prensa. Una novedad será la creación de un impuesto de “solidaridad” para las grandes fortunas de España y afectará a 23.000 contribuyentes, el 0,1% del total.
Se aplicará a aquellos que declaren unos ingresos superiores a los 3 millones de euros, y contará con tres tramos en las cargas impositivas extras. Para los que ganen entre 3 y 5 millones será del 1,7%, entre 5 y 10 millones del 2,1% y, para los que ganen más de 10 millones, del 3,5%.
El impuesto será de aplicación temporal, y será efectivo durante el 2023 y 2024. El Ejecutivo planea recaudar 1.500 millones con esta nueva medida. Para evitar la doble imposición, la ministra ha detallado que aquellas fortunas que abonen el impuesto de patrimonio en sus comunidades autónomas podrán deducírselo para este impuesto de solidaridad.
Críticas al “populismo” fiscal
Durante su comparecencia, Montero ha atacado las últimas maniobras de comunidades autónomas como la Andalucía, con la supresión del impuesto al patrimonio del gobierno del PP en la Junta o las bajadas fiscales anunciadas por el PSOE de Ximo Puig en la Comunidad Valenciana. Aunque no ha llegado a citar ningún caso concreto.
Montero ha atacado el “populismo” fiscal y calificado la “carrera a la baja” de algunas comunidades como un modelo que se basa más en el “sálvese quién pueda” y no en la solidaridad que mantenga los servicios públicos como la sanidad, las becas, las ayudas a la dependencia o a la vivienda.
En contraposición a ese debate fiscal de “trazos gruesos”, la ministra ha defendido que el objetivo de las nuevas medidas del Gobierno tienen como objetivo avanzar en la “justicia y cohesión social”, al tiempo que ha sostenido que las sociedades “más avanzadas y productivas” tienen sistemas fiscales “fuertes y robustos”. Las claves, para la ministra, están no en las subidas y bajadas, sino en “quiénes se benefician de la recaudación”.
Montero ha señalado que las medidas son imprescindibles para luchar contra la inflación, que este jueves moderó su crecimiento, que ahoga las cuentas de las familias por las consecuencias derivadas de la guerra de Ucrania.
La confusión de la mañana
Las medidas anunciadas en la rueda de prensa de este jueves llegan tras una mañana donde las contradicciones sobre los acuerdos dentro del Gobierno no han dejado de sucederse.
En los pasillos del congreso, la titular de Hacienda aseguró primero a los periodistas que el acuerdo dentro del Gobierno, en materia fiscal, ya se había alcanzado. Algo que fue desmentido poco después por el socio de coalición, Unidas Podemos. La ministra de Igualdad, Irene Montero aclaró que el acuerdo no se había alcanzado aún, pero que sí que había habido un acercamiento y “avances”.
Poco después, también la ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda del Gobierno ha salido a desmentir ante la prensa que se hubiera llegado a un acuerdo, si bien detalló que no tenía dudas de que se alcanzaría.