El Gobierno británico decidirá qué hacer si el acuerdo del Brexit es rechazado en el Parlamento
Theresa May ha logrado imponer su voluntad frente a la de quienes apostaban porque fuese la cámara legislativa quien tomase el mando.
La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, ha obtenido este martes una importante victoria en la Cámara de los Comunes que deja en manos del Gobierno la decisión de qué camino seguir en el caso de que el Parlamento rechace el futuro acuerdo de divorcio con la UE.
Los comunes han aprobado por 324 a favor y 298 una propuesta gubernamental para que, si los legisladores británicos rechazan el acuerdo del Brexit, sea el Gobierno quien decida qué hacer a continuación, no el Parlamento, como pretendían los pro europeos.
Esta votación era clave porque daba la oportunidad a los antibrexit del Partido Conservador de posicionarse contra el Gobierno de May, evidenciando así la fractura interna. Finalmente, solo dos 'tories' se han alineado con la oposición en la cámara baja, según ha informado la cadena pública BBC.
Sin embargo, ha tenido un coste político para el Gabinete de May. Horas antes, Phillip Lee, uno de los secretarios de Estado del Ministerio de Justicia, ha dimitido acusando al Gobierno de "limitar el papel del Parlamento" en el acuerdo sobre el Brexit.
El debate de este martes en la Cámara de los Comunes marca el inicio de la ofensiva de Downing Street para revertir los cambios operados por los Lores en la ley del Brexit.