El futuro de las artes sostenibles en medio de una crisis global
La artista Maria Staroselets espera generar un cambio social a través de un entretenimiento y una cultura respetuosos con el medioambiente.
El arte siempre será una parte importante de la sociedad. Su ausencia mantiene al público resguardado de las experiencias y la verdad del mundo, dándole una estrecha perspectiva de lo que sucede en su entorno. Después de todo, como dice el famoso dicho, “el arte debe acomodar a los alterados y alterar a los acomodados”. Por eso, la productora y directora creativa Maria Staroselets defiende las artes sostenibles en medio de una crisis global.
El arte idealiza personas, eventos y lugares, entre otras cosas, para que la audiencia pueda aprender a apreciarlos mejor.
Sin embargo, la crisis mundial sigue amenazando al arte debido al aumento de los precios, la inestabilidad política y el cambio climático. Maria Staroselets tiene mucho trabajo por delante, especialmente porque espera generar un cambio social a través de las artes y el entretenimiento sostenibles.
El cine y el teatro consumen un presupuesto considerable para la producción. Una vez terminados, se dejan artículos como accesorios y disfraces para que se sumen a la contaminación ambiental. María está aquí para cambiar eso.
Con la popularidad de la práctica de reducir, reutilizar y reciclar, varias empresas involucradas en la industria de las artes desarrollaron conceptos de producción sostenible, como el procesamiento y la reutilización de vestuario, escenografía y accesorios teatrales.
Maria Staroselets defiende las artes sostenibles, pero con el añadido de utilizar elementos del entorno inmediato para influir en el resultado. Enseña a sus compañeros directores y productores a utilizar la iluminación natural y repensar el entorno urbano, entre varios enfoques.
Señala cómo el entorno urbano ya contiene todos los elementos necesarios para crear una historia en cualquier género, desde el drama social hasta la comedia de terror. A medida que el mundo avanza, el paisaje, la arquitectura, la tipografía, el arte decorativo y el arte público llenan el espacio con mayor densidad cada año. Sin embargo, varias técnicas de narración permiten a los productores y directores presentar el escenario desde una perspectiva diferente, permitiendo que la audiencia perciba otro ángulo del entorno que coincide con la trama.
“La creación y el consumo de historias están en el centro del ser humano. Acumulamos, procesamos y compartimos información desde el nacimiento hasta la muerte. La forma puede cambiar dependiendo de nuestro entorno, pero la esencia sigue siendo la misma”, dice María.
Además, trasladar la actuación al entorno urbano, según María Staroselets, es más factible ya que las salas de teatro tradicionales se están vaciando lentamente. Además de la pandemia y el malestar político, la disolución del sentido de la relación convencional artista-espectador contribuyó a este declive.
“Trasladar los eventos teatrales al entorno urbano implica un estudio profundo de la historia, los principios arquitectónicos de los espacios de la ciudad, la acústica, las características climáticas y la iluminación. Estas prácticas permiten desarrollar la cooperación y la justicia, y repensar la propia identidad, los procesos modernos en la sociedad y armonizar las relaciones con el entorno”, dijo Staroselets.
Al ser un miembro activo de la industria de las artes y el entretenimiento, María anima a sus compañeros creativos a adoptar un enfoque de producción más sostenible. No solo reducirá los costos y disminuirá la cantidad de contaminación ambiental, sino que también puede crear una conexión más profunda con la audiencia mientras experimentan el arte desde una perspectiva moderna y urbana.
Han pasado dos décadas desde que María siguió una carrera en las artes, pero las partes interesadas, los creativos y el público, difícilmente olvidarán sus contribuciones para movilizar el cambio social.