A los espectadores de la ceremonia les quedó claro con los discursos de los premiados que son el alma de la fiesta y los anfitriones perfectos. Y este año lo han confirmado echando un simple vistazo a su mesa.
El vino Ribera de Duero era uno de los patrocinadores de la ceremonia y ellos, y sus compañeros de mesa, supieron dar buena cuenta de ello. Para muestra, esta imagen hecha cuando todavía quedaba una hora de ceremonia.
Seis botellas, seis. Saben cómo divertirse y cómo pasar el mal trago de una ceremonia bochornosa. Ellos, y el equipo de Paquita Salas con el que compartieron mesa. Tenían que celebrar el Feroz de Yolanda Ramos y lo hicieron como solo ellos saben.