El Congreso aprueba el nuevo cupo vasco
Ciudadanos y Compromís votan en contra en un debate marcado por la futura financiación autonómica
El Pleno del Congreso ha aprobado hoy la modificación del concierto económico vasco y la nueva metodología de señalamiento del cupo para el quinquenio 2017-2021, de 1.300 millones de euros, en un debate exprés con llamamientos del Gobierno y los grupos a cerrar ya la reforma de la financiación autonómica y con fuertes críticas de Ciudadanos.
En el caso del proyecto de ley del concierto, ha sido respaldada por 294 votos de los 330 diputados que se han pronunciado, ya que sólo Ciudadanos y Compromís se han manifestado en contra, mientras que el cupo ha tenido 292 votos a favor, dado que EH Bildu se ha abstenido en este caso.
Ciudadanos había presentado sendas enmiendas a la totalidad, que han sido rechazadas.
La aprobación se produce en un clima creciente de malestar entre diferentes autonomías, que creen que se debería haber acordado a la misma vez que el futuro sistema de financiación de régimen general.
Durante el debate, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha defendido el cupo y ha negado que suponga privilegios ni agravios para el País Vasco ni que su aprobación sea fruto de un pacto político con el PNV para sacar adelante los presupuestos generales del Estado.
Además, ha hecho un llamamiento a todos los partidos, en especial al PSOE, para sentarse a negociar ya el nuevo modelo de financiación de las comunidades de régimen común -todas menos el País Vasco y Navarra-, petición en la que han coincidido también los portavoces de la mayor parte de los grupos que han intervenido.
Durante estos días se han levantado voces en contra de esta tramitación exprés y por la tardanza en aprobar un nuevo modelo general por parte de autonomías como Andalucía, Asturias y la Comunidad Valenciana. Asimismo, esta luz verde al cupo coincide en plena precampaña catalana y con la vista puesta en la negociación de los presupuestos que el Ejecutivo quiere retomar tras el 21-D.
No obstante, Montoro ha querido desvincular esta aprobación del cupo -pactada hace unos meses por La Moncloa y Ajuria Enea- de un posible apoyo del PNV para sacar adelante las cuentas públicas para el año que viene.
RIVERA CRITICA EL "CUPONAZO"
Albert Rivera ha sido muy duro en el debate y ha opinado que el "cuponazo" no responde "a un cálculo técnico, sino a un amaño político", una "injusticia" que abunda en la insolidaridad entre territorios y que supone un "fraude" a la Constitución.
"¿Por qué no es urgente pensar en las otras comunidades y sólo es urgente pensar en el acuerdo con el País Vasco?", se ha preguntado Rivera, que ha afirmado que Euskadi es "receptora neta del resto de comunidades".
En su réplica, Montoro ha avisado de que "ciertos calificativos sobran, ciertos enfrentamientos entre ciudadanos sobran; sobra el énfasis en agravios comparativos".
Idoia Sagastizabal, del PNV, ha negado que el cupo suponga sobrefinanciación ni privilegios y ha hecho hincapié en que para que funcione se necesita "una gran capacidad de gestión política e institucional".
Quienes lo rechazan lo hacen por desconocimiento o por "intereses cortoplacistas" y "populistas", buscando el voto, ha dicho en alusión a Ciudadanos, a quien ha pedido que deje de "demonizar" el "éxito ajeno".