El capitalismo consciente llega al mundo del lujo
Las grandes multinacionales del sector del lujo no se quieren quedar fuera del movimiento sostenible global —ni perder compradores—.
El capitalismo consciente es la forma cool de denominar a la necesidad de hacer negocios sostenibles, no solo en la cuenta de resultados, también de responsabilidad respecto del medio ambiente y de la cultura laboral. Las nuevas tecnologías, la globalización y sobre todo la conciencia social de que el mundo ha de ser habitable, ya no es una moda sino una necesidad.
Lo que antes se llamaba RSC —Responsabilidad Social Corporativa— se ha transformado en “ayudar a mejorar la vida de los que nos rodean”, y esto se traduce en los más desfavorecidos —no necesariamente por motivos económicos— pero sí en el entorno de la ciudad o del país en el que se encuentran las empresas. Así los proyectos de “sostenibilidad de la España vaciada”, de productos locales de calidad (movimiento de la huerta a la mesa) y de comercio justo se imponen poco a poco.
Y junto a estos movimientos, las grandes multinacionales del sector del lujo no se quieren quedar fuera del movimiento sostenible global (ni perder compradores, que cada vez son más jóvenes y que influyen en la decisión de compra tanto propia como de sus familias).
En este sentido, el grupo Kering, H&M, Adidas e Inditex son las cuatro grandes referencias mundiales del retail en el ranking de sostenibilidad 2020 que publica Corporate Knights. Las grandes firmas además se han visto respaldadas los últimos días por el Foro de Davos, en el que la sostenibilidad ha tenido el máximo protagonismo. El estudio de CK lo engloban 7.400 compañías de todo el mundo que facturan más de 1.000 millones de dólares al año. Se analizan criterios de emisión de gases, ingresos relacionados con la economía verde, acción social y solidaria en los sitios en los que operan, gestión de residuos, igualdad de género y proyectos de inclusión social con personas con diferentes capacidades cognitivas. El nuevo mundo tiene que ver con la inversión real en investigación, educación y tecnología aplicada a quienes necesitan un mundo mejor.
Cuatro empresas en el ranking son como buscar una aguja en un pajar, pero por algo se empieza. Kering con sus marcas de moda y accesorios de lujo sostenible es la primera en el ranking, en el puesto 23, y se desploma respecto de 2019. H&M (Hennes&Mauritz), entra por primera vez en el Top 100 empresas sostenibles, instalándose en un buen puesto 27. Adidas, también gana buen número de posiciones, de puesto 84 al 55. El español Grupo Inditex pasa del puesto 54 al 94.
Ganar dinero sigue siendo el objetivo de estas multinacionales, pero con conciencia, aportando allí donde se mejora el bien general y se “marca la diferencia” en las particularidades locales.