El artista sudafricano William Kentridge, premio Princesa de Asturias de las Artes
El polifacético creador es conocido por sus dibujos, 'collages', esculturas y películas animadas.
El artista sudafricano William Kentridge ha sido elegido premio Princesa de Asturias de las Artes 2017. Según el acta del jurado, es merecedor del galardón porque "ha expresado en su obra emociones y metáforas relacionadas con la historia y la realidad de su país, que trascienden, sin embargo, estas últimas, y plantean cuestiones esenciales de la condición humana, combinando temas en que predomina la investigación puramente poética y estética con los de contenido sociopolítico".
"Creador meticuloso y profundo, ha utilizado el dibujo, siguiendo la mejor tradición, como principal instrumento de expresión artística, a través no solo de las obras sobre papel, el collage, el grabado y la escultura, sino también del videoarte, las películas animadas, las instalaciones y la escenografía, tanto en teatro como en ópera. En la última década ha recibido el reconocimiento de grandes museos como el Louvre y el Museo de Arte Moderno de Nueva York, con exposiciones celebradas en ellos sobre el conjunto de su obra, que representa la contribución más destacada del continente africano a la creación artística contemporánea con proyección mundial", añade el jurado.
SU TRAYECTORIA
William Kentridge, hijo de abogados especializados en las víctimas del apartheid, nació el 28 de abril de 1955 en Johannesburgo (Sudáfrica). Su padre desempeñó un papel destacado en juicios como Proceso por traición, ocupándose de la defensa de Nelson Mandela.
Kentridge estudió Ciencias Políticas y Estudios Africanos en la Universidad de Witwatersrand y posteriormente se matriculó en Bellas Artes en la Fundación de Arte de Johannesburgo. En los años ochenta estudió teatro en la Escuela Internacional de Teatro Jacques Lecoq de París y trabajó como director artístico en series de televisión. A partir de los 90 combinó el dibujo con el cine y el teatro, además de cultivar la escenografía, el collage, el grabado, la escultura y el videoarte.
Sus dibujos animados o películas dibujadas, como las denominan algunos especialistas, se han proyectado en las salas de los centros de arte más prestigiosos. Como explica la Fundación Princesa de Asturias, su técnica consiste en la filmación de dibujos que modifica una y otra vez, borrando y añadiendo trazos de inspiración expresionista, según los expertos, por medio de una paleta monocroma con ligeros toques de pastel azul o rojo.
Entre sus principales obran destacan las series Pit, casi treinta monotipos que realizó en los años setenta, y las Domestic scenes, cincuenta grabados de pequeño formato producidos en los ochenta, que son la base de sus carboncillos y animaciones posteriores. Destacan Johannesburg: 2nd greatest city after Paris (1989) y Felix in exile (1994) por la introducción de dos personajes, Soho Eckstein y Felix Teitlebaum. A través de ellos plasma el sufrimiento, la dominación, la culpa, el tiempo y la memoria, temas protagonistas de su obra.
A partir de 2003 Kentridge comenzó a interesarse por la escultura y la videoinstalación y a incluir referencias al teatro, la ópera y el cine en sus nuevos trabajos. En la última década ha mostrado su producción artística en el MoMA (Nueva York), que le dedicó una retrospectiva en 2010, el Albertina Museum (Viena), el Louvre (París) y el Museo de Bellas Artes de Budapest.
Galardonado con el Kyoto Premium (Japón, 2010) y el Dan David Prize (Israel, 2012), Kentridge es miembro honorario de la Academia Americana de las Artes y las Letras y doctor honoris causa por las universidades de Yale (Estados Unidos) y Ciudad del Cabo (Sudáfrica). En 2013 fue nombrado Caballero de las Artes y las Letras de Francia.
EL GALARDÓN
El Princesa de Asturias está dotado con una escultura de Joan Miró, 50.000 euros en metálico, un diploma y una insignia. En 2016 la galardonada fue la actriz, directora y escenógrafa Núria Espert.
Al premio optaban un total de 42 candidaturas procedentes de Alemania, Angola, Argentina, Australia, Brasil, Cuba, Estados Unidos, Francia, Hungría, Irak, Italia, Líbano, Mauritania, Noruega, Polonia, Portugal, Reino Unido, Sudáfrica y España.
El jurado estuvo presidido por José Lladó y Fernández-Urrutia e integrado por Bárbara Allende Gil de Biedma, Ouka Leele, Juan Manuel Bonet Planes, José Luis Cienfuegos Marcello, Oliver Díaz Suárez, Josep María Flotats i Picas, Carmen Giménez Martín, Blanca Gutiérrez Ortiz, Blanca Li, Catalina Luca de Tena y García-Conde, Joan Matabosch Grifoll, Elena Ochoa Foster, Alfredo Pérez de Armiñán y de la Serna, Sandra Rotondo Urcola, Emilio Sagi Álvarez-Rayón, Patricia Urquiola Hidalgo, Carlos Urroz Arancibia y José Antonio Caicoya Cores (secretario).