EEUU reitera sus elogios al plan marroquí para el Sáhara Occidental
Por “seria, creíble y realista”. Exactamente las mismas palabras que empleó Pedro Sánchez en su defensa del giro histórico de España en el conflicto.
El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, ha alabado en Rabat la iniciativa marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental y la ha calificado de “seria, creíble y realista”. Son exactamente las mismas palabras, apenas alterando el orden, con que Pedro Sánchez, el presidente español, justificó su apoyo a este plan hace apenas 10 días. Dice el norteamericano que esta solución “que puede satisfacer las aspiraciones del pueblo del Sáhara Occidental”.
Blinken está de visita oficial de dos días a Marruecos. Ayer, en una conferencia de prensa conjunta con su homólogo marroquí, Naser Burita, señaló que Washington apoya los esfuerzos del enviado personal del secretario general de Naciones Unidas, Staffan de Mistura, en la conducción del proceso político para la excolonia española, bajo los auspicios de la ONU. EEUU apoya a Rabat, desde que Donald Trump avaló su soberanía sobre los territorios saharauis, que el actual presidente, Joe Biden, no ha rectificado sino avalado.
La visita de Blinken se produce a dos días del viaje el próximo viernes del ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, a Marruecos tras la normalización de las relaciones diplomáticas entre Rabat y Madrid después del cambio de postura de España respecto al conflicto del Sáhara Occidental. El presidente Sánchez escribió el pasado 18 de marzo una carta al rey Mohamed VI de Marruecos en la que, entre otras cosas, se decía que el plan de autonomía de Marruecos para el Sáhara, presentado en 2007, es “la base más seria, realista y creíble” para la resolución de la crisis, en línea con las tesis de Rabat.
El ministro marroquí de Exteriores pidió en la rueda de prensa de hoy a los países europeos seguir el ejemplo de España y apoyar el plan marroquí de autonomía como solución para el conflicto del Sáhara. “La autonomía para el Sáhara es la única solución que apoya Washington, Francia y países africanos, y recientemente España y Alemania”, señaló Burita.
Al mismo tiempo, añadió que espera que la posición de España “no quede aislada” y añadió que para Europa ha llegado el momento de “salir de su zona de confort” para apoyar la propuesta marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental bajo la soberanía marroquí. Burita calificó de “fuertes y ambiciosas” las relaciones de cooperación entre Rabat y Washington, al tiempo que hizo hincapié sobre la voluntad del rey Mohamed VI de consolidar más las relaciones entre ambos países.
El ministro marroquí añadió que ambos países tienen una visión compartida sobre las diferentes cuestiones de interés común, relacionadas con la estabilidad y la seguridad regional e internacional. Asimismo, Burita se refirió al acuerdo tripartito firmado en diciembre de 2020 con Estados Unidos e Israel con el que Rabat reanudó sus relaciones diplomáticas con el país hebreo. “El acuerdo también es un mensaje a la región sobre la necesidad de una solución de dos Estados, Israel y Palestina con la frontera de 1967”, apuntó.
“La fase difícil de sequía”
Blinken expresó el compromiso de su país de reforzar las relaciones de amistad con Marruecos, así como de ayudar al país magrebí en “la fase difícil de sequía” que está atravesando este año. El secretario de Estado explicó que Marruecos recibirá 460 millones de dólares (418 millones de euros) en subvenciones en el marco del quinto año del programa estadounidense Millennium Challenge para promover la educación y empleo de jóvenes, y recordó que la semana pasada se celebró una reunión entre oficiales marroquíes y estadounidenses sobre la ampliación de la zona industrial de Buznika (centro).
Señaló también que Marruecos recibió en los pasados meses un total de 2,45 millones de dosis de la vacuna Pfizer en el marco del programa Covax de la ONU para apoyar los esfuerzos del país en la lucha contra la pandemia. Blinken además elogió el plan de Marruecos para alcanzar el objetivo de que el 52 % de la producción de su energía proceda en 2025 de energías limpias.