EEUU aprueba el primer nuevo tratamiento contra el Alzheimer desde 2003
La FDA da el visto bueno a usar el medicamento comercializado bajo el nombre Aduhelm.
Una noticia que puede dar esperanza a millones de personas en todo el mundo. La agencia reguladora de medicamentos de EEUU (conocida como FDA por sus siglas en inglés) ha aprobado el primer nuevo tratamiento contra el Alzheimer desde 2003.
El medicamento, desarrollado por la empresa Biogen y llamado Aducanumab —aunque se comercializa como Aduhelm— es un inyectable que se administra mensualmente para ralentizar el deterioro cognitivo en las primeras etapas de la enfermedad.
La propia FDA reconoce que “esta aprobación es significativa de muchas maneras”. Más allá de ser el primer tratamiento novedoso en casi dos décadas, reconocen que es el primero dirigido a reducir uno de los síntomas más visibles de la enfermedad, la presencia de placas de beta amiloide en el cerebro, y no solo a abordar los síntomas posteriores.
Los ensayos mostraron que el fármaco ataca esas placas, lo que ayudaría a frenar el empeoramiento de la condición de los pacientes, de acuerdo con los ensayos desarrollados en los últimos años y, especialmente, en los últimos meses.
La aprobación de urgencia del regulador americano sobre el Aduhelm para su uso en pacientes no ha estado exento de polémicas. Incluso la FDA reconocía en un comunicado anterior “cierta incertidumbre sobre el beneficio clínico del medicamento”, que ahora ha tornado en respaldo mayoritario. “Los beneficios para los pacientes superaban los riesgos de la terapia”, matiza la nota publicada este lunes.
“Reconocemos la necesidad médica insatisfecha de los enfermos de Alzheimer, la naturaleza devastadora de la enfermedad para los pacientes y sus familias, y la urgencia de que el tratamiento esté disponible”, ha explicado la FDA en sus redes al presentar la noticia.
Los síntomas del Alzheimer
Según diversos estudios, alrededor de 50 millones de personas sufren la enfermedad en todo el mundo y cerca de 800.000 solo en España, con un incremento cercano a los 40.000 cada año.
Sus efectos son evidentes por el deterioro cognitivo que sufren quienes son diagnosticados, pero puede confirmarse si se cumplen varios de estos síntomas:
La FDA data entre cuatro y ocho años el periodo de supervivencia medio de una persona que sufra este trastorno, si bien hay pacientes que llegan a vivir con él durante 20 o más años.